Con dos catalizadores de NOx
El nuevo Audi SQ5 TDI es más deportivo tanto estéticamente como a nivel de rendimiento. Y con la campaña de acoso y derribo que el diesel sufre desde hace unos años es apropiado mencionar los sistemas que hacen que de estos modelos unos coches más bien limpios.
Su presentación coincide con la del restyling del Audi Q5, y también en carrocería Sportback. Cabe destacar que esta versión cumple 8 años. Se presentó en 2012 como el primer diésel de la familia S de Audi. Si en su presentación su motor 3.0 contaba con 313 CV, esta nueva generación sube esa cifra hasta los 341 CV, aunque curiosamente es 6 CV menos potente que la versión de 2019. Por otra parte el par motor sí que es el mismo, con 700 Nm.

Audi SQ5 TDI 2021: puesta a punto del motor
El motor de 3.0 litros V6 cuenta con tecnología mild hybrid de 48V para reducir el consumo en torno a 0,7 litros/100 km. También se han mejorado otros aspectos técnicos de este motor, como los nuevos pistones de acero forjado, que ahora son más resistentes y reducen las pérdidas de calor de los anteriores, fabricados en aluminio. Otra novedad es el nuevo intercambiador indirecto agua/aire situado en el interior de la V de los cilindros, que sustituye al anterior intercooler aire/aire que estaba colocado en el paragolpes.
El turbocompresor monta una turbina de menor tamaño y peso que alcanza mayores velocidades, ofreciendo una mejor entrega de par. También se ha aislado de forma más eficaz, logrando que los gases se calienten más rápidamente tras el arranque en frío. Cuando el flujo de gases de escape no tiene suficiente fuerza, le ayuda un compresor eléctrico alimentado por el sistema eléctrico de 48V, acelerando la turbina del compresor a unas 65.000 rpm en 300 milisegundos. Esto permite una respuesta inmediata al iniciar la marcha o cuando se acelera con el motor girando a bajas revoluciones.

En cuanto a suspensiones, emplea hasta 5 brazos para guiar cada una de las cuatro ruedas, mientras que adopta un tren de rodaje deportivo S con control de amortiguación que rebaja la altura de la carrocería en 3 cm respecto a sus hermanos de gama Q5. Integrados también en el Audi drive select, los amortiguadores se regulan en función del modo de conducción elegido (auto, comfort, efficiency, dynamic, offroad e individual).
En opción se dispone del siempre útil diferencial deportivo para el eje trasero, que controla de forma activa el reparto del par entre las dos ruedas distribuyendo más par a la rueda con más agarre (la trasera exterior), forzando al coche a inscribirse en la trazada, lo que reduce mucho el subviraje. La unión con el asfalto se realiza por medio de llantas de aleación de 20″ (neumáticos 255/45), si bien hay varias llantas de 21″ firmadas tanto por Audi como por Audi Sport GbmH, ocultando delante frenos con discos de 375 mm de diámetro y pinzas de aluminio de 6 pistones en color negro (opcionalmente, en rojo) con el logotipo S.

El motor V6 de este Audi SQ5 TDI 2021 cuenta con tecnología twin-dosing, que utiliza el funcionamiento de dos convertidores catalíticos SCR para reducir las emisiones de NOx, con lo que se cumplen holgadamente los límites establecidos en la norma Euro 6d. Los dos cuentan con inyección de urea (AdBlue), almacenado en un depósito de 24 litros.
Estará a la venta en el primer trimestre de 2021, con un precio a partir de 78.150 euros con faros Matrix LED de serie, así como luces traseras OLED opcionales.