Ford adelanta la nueva generación
El “pick up” más popular de Ford se renueva a fondo en la quinta generación que representa el Ford Ranger 2022, destinado a cumplir un doble papel, como vehículo profesional de trabajo y a la vez como vehículo de ocio familiar.
Desarrollada por Ford Australia y proyectada para fabricarse en Sudáfrica y Tailandia, este nuevo Ranger no tiene a Europa precisamente entre sus mercados prioritarios, por lo que aquí no llegará comercialmente hasta el primer trimestre de… 2023. O sea que en 2022 se lanzará de forma progresiva en el resto del mundo, mientras que su presentación se anticipa en este final de 2021.
Aunque similar al anterior Ranger, su estampa frontal llama más la atención, por sus nuevos faros de diodos y la luz diurna también de diodos, en forma de C rodeándolos, junto a su gran parrilla con dos lamas longitudinales que enmarcan el óvalo de la marca, de gran tamaño. Los faros de diodos son de serie, quedando en opción los especiales Matrix LED.
El nuevo Ranger utiliza la plataforma modificada T6, con 5 cm más de batalla y otros 5 cm más de vías. Su frontal es totalmente, con distinta parrilla y unos faros con diodos cuadrados de diseño muy original. El chasis mantiene su estructura tradicional de largueros y travesaños, aunque modificada para ganar espacio en el vano motor, no solo para poder alojar un motor V6 además de los 4 cilindros (todos diésel) sino también para poder incluir más adelante una versión electrificada, un Ranger híbrido enchufable previsto para 2023 y que será probablemente la versión más orientada para los mercados europeos.
La caja puede tener puntos de luz y una serie de accesorios especiales según los tipos de carga, tanto para compartimentarla como para trabajar sobre ella (dispuestos y fabricados junto con el especialista ARB 4×4). Un detalle de agradecer, dada su notable altura libre al suelo, es un punto de apoyo como escalón de acceso a la caja situado por detrás de las ruedas traseras. Son mejoras que según Ford, han tenido en cuenta las sugerencias de los clientes del modelo en todo el mundo, con vistas a fidelizarlos.
Los cambios en el chasis han permitido a su vez mejorar el ángulo de ataque para uso “off road” (el aumento de batalla es fruto del adelanto del eje delantero, para no aumentar mucho la longitud) y mejorar la estabilidad, con mayor recorridos de suspensión en uso fuera del asfalto. Todavía no se han hecho públicas sus medidas, aunque se espera que apenas aumenten las ya de por sí muy grandes del actual Ranger (5,36 m de largo sobre una plataforma de 3,22 m de batalla, que ahora sube a 3,27 m, por 1,87 m de ancho y 1,85 m de alto), sobre todo teniendo en cuenta que compartirá su plataforma con el Volkswagen Amarok, unas sinergias frecuentes en el mundo de las pick-ups entre las marcas germanas (recordemos que Mercedes hizo lo mismo con su Clase X y el Nissan Navara).
Vehículo de trabajo, pero conectado
Pese a que a Europa vendrá tarde (y eso que es el pick-up más vendido en su categoría) procedente de la planta sudafricana, lo hará con una insólita dotación de vanguardia en lo relativo a cibernética y conectividad. Ahora tenemos un cuadro digital, con el sistema multimedia SYNC 4 de Ford, con pantalla vertical táctil de 25,7 ó 30,5 cm (10,1” o 12”) y compatible con entornos Android Auto y Apple Car Play, además de con varias tomas USB y soporte de carga inalámbrica de móviles.
Eso sí, casi todos los mandos se activan a través de la pantalla multimedia, aunque Ford ha dejado los mandos del climatizador justo por debajo y mantenido los mandos al volante algunas funciones como la radio y equipo de sonido, teléfono o las ayudas más frecuentes a la conducción.
También podrá contar con mando por voz y la “app” Ford Pass para activar el telemando remoto de funciones a través del móvil (abrir y cerrar el coche, localización del vehículo, encender o apagar luces, etc). De igual forma, puede llevar un modo específico de visión en pantalla al circular “off road” con cámara a 360º.
El habitáculo crece en anchura los mismos 5 cm que gana la carrocería y la caja de carga, mejorando su amplitud, prevista para 5 plazas. Se ha aumentado el número de huecos portaobjetos con una segunda guantera sobre el salpicadero, mayores huecos de puertas y otros bajo los asientos y un portaobjetos más grande en el apoyacodos entre asientos (y otro tras los asientos traseros en las versiones doble cabina). Y hablando de cabinas, este Ranger 2022 se ofrecerá con cabina simple, cabina extendida y doble cabina (ya con 4 puertas), ofreciéndose también esta última como ahora en versión Wildtrack para uso de ocio y exploración.
Podrá contar con enchufes para corriente alterna (hasta 400W), iluminación interior por diodos y múltiples detalles para facilitar su uso como instrumento de trabajo, como portón inferior de la caja abatible para poder ser usado como banqueta o mesa de trabajo (lleva hasta una regla móvil incorporada), recubrimiento plástico protector de la caja de carga, anclajes para pinzas para sujetar y hasta cortar materiales, etc.
Motores, según las regiones de venta
En cuanto a motorizaciones, lo que sabemos de momento es que la oferta se centra en tres turbodiésel, un dos litros de 4 cilindros decantado en dos versiones (la segunda biturbo) que será la opción más comercial con una potencia que debería oscilar de 150 a 200 CV, según las existentes ahora mismo en estos motores), y luego un V6 de tres litros, sobre los 250 CV ( Ford Ranger Raptor).
El cambio podrá ser el clásico manual de 6 relaciones o bien un automático por convertidor de par (con hasta 10 marchas) y la tracción total 4×4 tendrá dos niveles: el ya conocido de acceso, sin diferencial central y tracción a elegir entre trasera o total, y otro más completo, con tracción total permanente por reparto automático, diferencial central y reductora (aunque parece que sólo con bloqueo del diferencial trasero). En todo caso, y dado el tiempo que aún tardará en llegar este modelo a nuestro mercado (el actual Ranger seguirá en catálogo durante todo 2022), es pronto para avanzar más detalles, tanto de acabado como de motorizaciones, y por supuesto, precios.