El SUV familiar que viene del Este

La marca checa del grupo Volkswagen entra en el mercado de los grandes SUV de 7 plazas con este Skoda Kodiaq, de cuidado interior, amplia habitabilidad, enorme maletero, y calidad en alza, destacando su nivel de equipamiento así como sus soluciones funcionales como principal arma frente a su competencia. Se ofrece por algo más de 38.000 euros.

A cambio, ya no es tan barato, sobre todo en los niveles superiores de acabado, y sufre ante la competencia asiática, por no hablar de la interior del grupo… Este Kodiaq 4×4 con el motor 2.0 TDI de 150 CV, 7 plazas, cambio manual y en el nivel máximo Style se pone ya en 38.600 euros sin incluir descuentos (el mismo precio que si lo queremos en 4×2 pero con el cambio DSG de 7 marchas), aunque la marca avisa que hay un Kodiaq desde 26.360 euros (en 4×2, nivel básico Active y motor 1.4 TSI de gasolina y 125 CV).

En cualquier caso, Skoda busca con este SUV más bien grande, abrirse a un nuevo segmento SUV para llegar a una clientela hasta ahora fuera de su alcance, y armas no le faltan. Para ello a este Kodiaq no le faltan argumentos, por diseño, posibilidad de disponer de 7 plazas, o su treintena de soluciones prácticas, las “Simply Clever” que llama la marca, que facilitan la vida a bordo con huecos portaobjetos por todo el habitáculo, portaparaguas en las puertas, un rascador de hielo en la tapa del depósito, etc. Si a ello unimos mecánicas de hasta 190 CV y opciones como la tracción total o el cambio automático DSG de 7 relaciones, es innegable que el coche ofrece un alto atractivo.

Una carrocería muy bien aprovechada

El Kodiaq recurre a la plataforma modular MQB del grupo Volkswagen, la misma del Seat Ateca, pero con mayor presencia y estirada al máximo (pronto la veremos también en el Tiguan TL) hasta alargar su batalla en 15 cm, (2,79 m) y la longitud de su carrocería en casi 34 cm, de modo que llega hasta los 4,70 m de largo, ya en el segmento superior D, aunque en el tramo de los más recogidos… La plataforma común permite compartir componentes, abaratando costos a través de las economías de escala, con una flexibilidad que les convierte en coches muy distintos.

Su diseño incluye el nuevo lenguaje de la marca, con líneas que combinan la elegancia con la deportividad. En su parte frontal, encontramos la parrilla típica de Skoda con lamas verticales y faros dobles estrechos. En su vista lateral apreciamos su gran batalla y voladizo trasero, además de pasos de rueda con cierto ángulo que alojan llantas de aleación de aluminio de 18 pulgadas (con neumáticos Michelin Latitude Sport 3 y medida 235/55 R 18). Sus 4,70 m de largo no resultan excesivos para su habitabilidad, con una anchura de 1,88 m y 1,66 m de altura. Este nuevo Skoda Kodiaq tiene una gran resistencia a la torsión y aerodinámica aceptable, si bien, su peso ya alcanza los 1.710 kilos en vacío.

Una de las grandes ventajas del Skoda Kodiaq es su gran espacio interior, que le sitúa por encima de la media de sus competidores (Nissan X-Trail, Hyundai Santa Fe, Mitsubishi Outlander y VW Tiguan Allspace de similares dimensiones), sólo le gana, entre los de 7 plazas, el recién presentado Hyundai Santa Fe 2018 y el Kia Sorento con sus 4,77 y 4,78 m, respectivamente. Además, presenta una alta calidad percibida en sus materiales, suaves al tacto y dotado de un salpicadero presidido por una pantalla central de 8 pulgadas con navegador incluido. Los asientos delanteros tienen interesantes opciones como el ajuste eléctrico con memoria y su climatización individual, tanto en ventilación como calefacción.

La fila central de pasajeros es bastante amplia y versátil, con una banqueta de 1,45 m de ancho para acomodar a tres adultos, si bien la plaza central resulta un poco dura y está ligeramente elevada, viéndose estorbada por el voluminoso túnel central de la transmisión. Dicha banqueta se desplaza longitudinalmente 18 cm, lo que permite tener o más espacio para piernas (78 cm) o incrementar el volumen útil del maletero. En cuanto al opcional  incorporado de una tercera fila de asientos (1.025 €), su dos asientos individuales están pensado más para niños, pues para adultos no hay demasiado espacio para las piernas, además de requerir cierta agilidad para su acceso (si se usan para adultos o niños grandes, hay que adelantar bastante la banqueta de la 2ª fila).

Con la tercera fila plegada y la segunda fila desplazada al máximo hacia delante tenemos un enorme maletero de 720 litros (y además contamos con una rueda de repuesto de tipo emergencia). Si dejamos los asientos en posición retrasada, la capacidad sigue siendo bastante buena con 540 litros, llegando hasta 2.065 litros si plegamos también los asientos de la segunda fila, con un fondo de 2,80 m y la ventaja añadida de un bajo umbral de carga lo que facilita introducir grandes bultos, y más aún con el portón del maletero automático en su apertura y cierre.

Y cuando recurrimos a ocupar las 7 plazas, aunque el maletero se reduce al mínimo, aún quedan 220 litros para algunas bolsas y mochilas, lo que es más de lo que ofrecen la mayoría de sus rivales 5+2…

Mecánica suficiente

Teniendo en cuenta el peso y tamaño de este Skoda Kodiaq, resulta evidente que la opción diésel (por otra parte mayoritaria en los SUV de este segmento) se impone por economía… Asociado a una caja manual de 6 relaciones, nuestra unidad de prueba incorporaba el motor 2.0 TDI con 150 CV (34,7 mkg desde 1.750 rpm), propulsor fiable y potente que viene ya adaptado a la normativa Euro 6 al incorporar un catalizador SCR de gases NOx con el aditivo AdBlue a base de urea.

Con la adaptación a la normativa Euro 6 es algo menos brillante, dando la sensación de que corre menos de lo que en realidad lo hace. Su entrega de potencia es lineal pero su elevado peso la hacer ser no muy contundente. Además, al entregar su potencia máxima entre 3.500-4.000 rpm (por encima cae significativamente), el rango de uso se reduce. Su empuje se percibe entre 1.600 y 3.000 rpm, dando la sensación de que no interesa subir mucho más de revoluciones.

En cuanto al nivel de ruido del motor, se ha trabajado adecuadamente su insonorización hacia el habitáculo, y apenas llegan vibraciones al interior.

Su caja de cambios es precisa y está correctamente escalonada, con una 6ª velocidad de 57,5 km/h que permite circular a 90 km/h a solo 1.500 rpm, siendo más corta que la 7ª marcha del cambio automático DSG. Su tracción integral de tipo Haldex (quinta generación) recurre al eficaz embrague multidisco, que transmite algo de par al eje trasero al arrancar y lo dosifica de manera rápida en función del resbalamiento. En cuanto a la dirección eléctrica, su tacto es preciso y es suficientemente rápida, pero no aporta toda la información deseada de lo que pasa en el piso. Los frenos de disco (ventilados los delanteros) son adecuados y de generosas dimensiones (312 mm delante y 300 mm detrás), pero en uso intensivo se fatigan, mientras que en uso esporádico debemos calentarlos previamente para lograr toda su eficacia.

Respecto a su competencia, sus prestaciones le sitúan algo por debajo de la media, sin duda penalizado por su peso, el tamaño de sus neumáticos y la tracción 4×4. Pese a ello comunica una velocidad máxima de 197 km/h (188 reales), y su aceleración de 0-100 km/h nos la hizo en 9,8 segundos. Las recuperaciones son discretas, por ejemplo circulando a 50 km/h en 5ª cubre los 400 m en 17,8 segundos y los 1.000 m en 31,0.

En cuanto a consumos son bastante parcos, y circulando entre 90-100 km/h consumió 5,4 l/100 km, subiendo a 6,6 litros entre 120-130 km/h. Pero si se carga mucho y queremos andar rápido, el consumo en carretera no baja de los 6 litros (y en autovía de los 7) cada 100 km, lo que ya no es tan poco… El consumo urbano se queda en 6,9 l/100 km, beneficiado sin duda por el sistema Stop/Start.

Comportamiento seguro y confortable

Con un comportamiento dinámico que ha buscado el compromiso entre confort y estabilidad dinámica, este Skoda Kodiaq tiene una alta calidad de rodadura. Si su gran batalla y elevado peso le penaliza en curvas de montaña, por el contrario destaca por su gran aplomo y velocidad de paso por curvas más abiertas, con poco balanceo y buena transacción en los cambios de apoyo, ayudado sin duda por sus barras estabilizadoras y amortiguación adaptativa.

En vías rápidas transmite una alta sensación de seguridad por su estabilidad y precisión en la trazada, mientras que por pistas de tierra se beneficia de su eficaz tracción 4×4, que no se nota cuando distribuye el par entre los dos ejes.

Además, se ofrecen distintos modos de conducción a través de un botón situado al lado de la palanca de cambio, con cuatro niveles de actuación: Eco, Confort, Sport, Individual y Snow.

Buen equipamiento

El nivel de equipamiento de esta unidad probada corresponde al Style, el máximo de la gama (muy completo), incorporando de serie la llave manos libres de acceso y arranque, el climatizador de tres zonas, el automatismo de los limpiaparabrisas y los faros, el navegador Amundsen con cámara de visión trasera integrada, freno de mano eléctrico, el portón automático del maletero, …

E independientemente del equipamiento de serie, además incluye variados sistemas de asistencia a la conducción como la vista perimetral Area View, Asistente de Remolque, frenada de emergencia en ciudad, el detectaor de fatiga o el Control de Crucero Adaptativo, estando estos dos últimos integrados de un paquete opcional.

Y si hablamos de conectividad, el sistema Skoda Connect se encarga de el infoentretenimiento, permitiendo la conexión «online» incluso con la navegación además de la función Mirror Link, tanto para sistemas Android como Apple Car Play. Además, el Skoda Kodiaq incorpora la llamada de emergencia tras un accidente (WLAN) y la App Sokda Connect que facilita el acceso a servicios adicionales, Wi-fi y el cargador inalánbrico para teléfono Smartphone.

Lo que no quita para que queden un buen conjunto de opciones (eso sí, no demasiado caras, la más cara sería la de los asientos ventilados -1.320 €- pero por ejemplo la tapicería de piel -825 €- o los asientos calefactados -200 €- son bastante justos), que en total, suponiendo que elijamos las más interesantes nos pueden suponer unos dos mil euros más, un precio aún en un nivel competitivo para un SUV “crossover” de 7 plazas como éste, que con los descuentos por promoción y financiación suman algo más de 5.000 € menos.