Tecnología innovadora de ajuste de suspensión

Ford ha presentado recientemente en su nuevo Ford Focus una innovadora tecnología que puede reducir el impacto de los baches en la estructura del vehículo.

Los conductores europeos se enfrentan diariamente a calles, carreteras y autopistas deterioradas, agravada este año en algunas zonas por la masa de aire frío proveniente del Ártico, que ha traído temperaturas gélidas y que han contribuido al deterioro del asfalto. El resultado más evidente de esta situación son los incómodos baches, causantes en muchos casos de grandes costes de reparación por los desperfectos en neumáticos e incluso la rotura de amortiguadores.

Para evitar este serio problema, la nueva tecnología de detección de baches que podrá incluir el nuevo Ford Focus puede reducir el impacto de los mismos en la estructura del vehículo. Esta tecnología ha sido afinada en una pista de pruebas en Bélgica donde se replican los peores baches del mundo, y donde los ingenieros lo perfeccionan con cientos de horas de pruebas en cientos de carreteras públicas europeas, registrando cargas y esfuerzos con equipos similares a los que utilizan los sismólogos para estudiar los terremotos.

Este nuevo sistema de detección de baches podrá incluirlo el nuevo Ford Focus de manera opcional, y es una tecnología de Amortiguación Controlada Continua, que revisa cada 2 milisegundos la suspensión, el chasis, la dirección y los frenos, y ajusta las respuestas de la suspensión del vehículo para hacer posible una conducción más fluida.

El sistema detecta cuando una rueda cae en un bache y ajusta la suspensión para que la rueda no se hunda tanto. Al no hundirse no golpean el lado opuesto del bache con tanta fuerza, e incluso la suspensión trasera puede responder más rápido que la delantera, ya que esta última puede preavisar a la rueda trasera en una fracción de segundo antes de que llegue al bache, pudiendo ser considerada como un nuevo tipo de amortiguación variable.