Si bien básicamente el S60 concept es un estudio de diseño, lo cierto es que la marca sueca ha adelantado también algunas de las novedades técnicas que acompañarán el lanzamiento de esta nueva berlina y que posteriormente se aplicarán al resto de modelos. Volvo tiene en el S60 a su modelo más veterano, ya que, si bien a lo largo de estos años se le han hecho retoques estéticos, la berlina data de 2000 y poco puede hacer frente a las nuevas generaciones de sus rivales más directos que han ido apareciendo en los últimos tiempos.
A la hora de concebir la futura berlina, los diseñadores han dado rienda suelta a su imaginación y han preparado una silueta con estilo coupé. La carrocería muestra un frontal muy atractivo no tan sólo por el diseño de los grupos ópticos sino también por pequeñas tomas de aire situadas por debajo de los mismos. La línea de cintura es bastante alta y se ve acentuada por unos hombros traseros laterales bien remarcados.

Como detalle curioso, destaquemos el sofisticado sistema de apertura de las puertas; mientras las delanteras se abren de modo convencional, las traseras se separan de la carrocería y se desplazan hacia atrás, facilitando de este modo el acceso al habitáculo que está configurado para admitir cuatro plazas; en consecuencia, no hay pilar central entre las puertas, lo que estiliza aun más la silueta del modelo.
La decoración estética externa se completa con unas llantas de 20 pulgadas pintadas en tonalidad bronce, un techo totalmente de cristal o unos grupos ópticos con tecnología led de un solo color que cambia cuando se activan los frenos, la luz de marcha atrás o los intermitentes. Obviamente, algunos de estos guiños estéticos desaparecerán cuando el modelo entre en producción, ya que no se ajustan a las normativas vigentes, pero de momento sirven para darle más impacto al concept.

Si por fuera el S60 concept es llamativo, no lo es menos por dentro. La consola central de gran tamaño mantiene ese diseño flotante ya característico de la marca pero está elaborada en cristal Orrefors y desde el salpicadero se prolonga entre los asientos hasta la zona trasera. El cuadro de instrumentos de lectura digital presenta otro guiño de diseño, ya que la instrumentación adopta una silueta espiral de cristal tridimensional y se muestra en un plano más próximo cuando se rueda a baja velocidad, alejándose cuando ésta se incrementa; también presenta una función head-up display que la proyecta en el parabrisas frente al conductor para que su lectura sea cómoda y no haya que apartar la vista, como ya puede verse en otros modelos de la competencia.
Entre las novedades mecánicas que presentará el modelo está un nuevo motor de gasolina que hará su aparición a mediados de este año. Se trata de un 4 cilindros de 1.6 litros con inyección directa y con combustión estratificada, es decir funcionamiento con mezcla pobre. Incorpora turbocompresor y anuncia una potencia de 180 CV habiéndose homologado un consumo medio de 5,5 litros a los 100 kilómetros y unas emisiones de 119 gramos de CO2. Va equipado con un sistema de arranque y parada cuando el coche está detenido y va asociado a un cambio de marchas Powershift de doble embrague y 6 velocidades que se acciona a través de un selector que intercambia el modo automático y secuencial, variando la posición de la palanca entre horizontal y vertical.

Volvo quiere que el S60 sea un coche muy respetuoso con el medio ambiente y por ello llevará la dirección eléctrica EPAS de bajo consumo, así como también el dispositivo denominado Drive-Mode mediante el cual el conductor puede limitar el funcionamiento de diferentes sistemas electrónicos o mecánicos como el aire acondicionado, la dirección o la gestión del cambio.
Por lo que concierne a seguridad, el S60 Concept lleva una evolución del dispositivo City Safety estrenado en el nuevo XC60 y que detecta un obstáculo en la vía, bien sea estático o móvil activando el sistema de frenado por sí mismo y evitar así el impacto.
En el caso del S60, el sistema procesa e identifica si el obstáculo es un ser humano y puede evitar atropellos circulando a menos de 20 km/h. También dispone de un nuevo control de velocidad activo ACC capaz de detener por completo el vehículo en caso de atasco o retención, para volver a ponerlo en marcha una vez las condiciones lo permiten.