Prueba: Hyundai Kona 1.6 GDi HEV N-Line Style

25 junio, 2024
J. Robredo

Un híbrido para todos

Probado en su versión híbrida autorrecargable en el nivel máximo N-Line Style, el Hyundai Kona HEV tiene 141 CV y sale por 40.690 euros (sin incluir descuentos). La segunda generación del SUV urbano polivalente Hyundai Kona, premio Motor Mundial “Coche del Año 2024 en España”, se presentó en 2023 como un modelo totalmente nuevo en diseño y tecnología, con mecánicas de gasolina, microhíbridas a 48V, híbridas HEV y eléctricas 100%.

El Hyundai Kona HEV es una de las versiones más populares del SUV compacto de Hyundai por su agrado de conducción, bajos consumos y etiqueta medioambiental ECO, la más demandada en las grandes ciudades. Como su antecesor, se acerca en tamaño al Tucson, dotado de un diseño muy diferente con una línea de luz que cruza su frontal. Estamos ante de uno de los SUV del segmento B de mayor éxito de los últimos tiempos.

Prueba: Hyundai Kona 1.6 GDi HEV N-Line Style

A FAVOR EN CONTRA
Habitabilidad y maletero Cambio DCT demasiado autónomo
Consumos muy bajos Ayudas a la conducción intrusivas
Confort y silencio de marcha
Nivel de equipamiento
Etiqueta ECO

Una imagen distinta

Por fuera mide 4,36 m de largo (4,38 en los niveles altos, como el probado), 1,83 m de ancho y 1,58 m de alto con una distancia entre ejes de 2,66 m. O sea 15 cm más largo, 2,5 cm más ancho y 2 cm más alto que antes, con 6 cm más de batalla, un tamaño que gana mucho en espacio útil respecto al primer Kona y se aleja más del Bayon (que sí que es un típico SUV polivalente del segmento B). Su imagen es ahora más geométrica y angulosa, muy futurista con su frontal con una fina banda horizontal luminosa de diodos junto a ligeros cambios de diseño frontal y posterior entre niveles para facilitar su reconocimiento.

Su rasgo más llamativo es el marcado perfil diagonal de los laterales, que conecta la moldura cromada desde la línea del cinturón hasta el deflector trasero, en un contorno que envuelve todo el vehículo. La parte trasera incorpora otra luz horizontal de diodos, así como una luz de freno integrada en el deflector de techo. Desde luego, Hyundai ha logrado dar otro aspecto al nuevo Kona, desde el frontal con la línea de luz que cruza todo el frontal por arriba, a la zaga donde va igualmente otra línea de lado a lado, con los pilotos como tales más abajo y en las esquinas (aunque también más expuestos que antes). En general su aspecto es ahora más agresivo, pero sin dejar de ser proporcionado, con mejor aerodinámica (Cx de sólo 0,27) y un nivel deportivo N Line, ahora más extendido y popular, con distintas partes en negro, como la parrilla y los retrovisores.

Prueba: Hyundai Kona 1.6 GDi HEV N-Line Style

Más amplio y equipado

En el interior, sorprende el aumento de habitabilidad logrado con los 15 cm más de largo y los 6 más de batalla, especialmente en las plazas traseras que con casi 10 cm más de espacio para las rodillas junto a los 3 cm más de ancho permite alojar mejor a tres adultos, con una notable altura al techo, suficiente incluso a quienes superen el 1,80 m de estatura. Además los ocupantes de esta fila disponen de una miniconsola con aireadores, dos tomas USB-C y respaldos de asientos ajustables en dos posiciones y plegables en tres partes (40/20/40), estando entre las más cómodas y holgadas de su clase.

El habitáculo es amplio y funcional, la posición al volante ergonómica y en el salpicadero se recurre al diseño conocido en otros modelos de la marca, con doble pantalla contigua (ambas de 12,3 pulgadas), una para el cuadro de instrumentos y otra para el sistema multimedia, visualmente unidas bajo un plástico protector curvado. El cuadro de 12,3” (31 cm) es claro y de alta resolución, y aunque no admite demasiadas formas de personalización, se puede cambiar el color de su fondo entre modos de conducción así como la muestra de datos (normal con dos esferas de agujas y el más discreto con la velocidad y giro del motor en cifras).

Prueba: Hyundai Kona 1.6 GDi HEV N-Line Style

El sistema multimedia, compatible con Android Auto y Apple CarPlay, va conectado a internet (permite acciones a distancia mediante una “app” telefónica) y se actualiza de forma inalámbrica (OTA). A su favor tiene que tanto la calefacción como el climatizador tienen mandos físicos, sin pasar por pantalla, lo que facilita su manejo en marcha. Un detalle curioso es el selector DCT del cambio, situado en la columna de dirección (como en su hermano el Ioniq 5), muy a mano sin tener que quitar apenas las manos del volante, lo que además libera espacio útil en la consola, entre los asientos delanteros, para diversos huecos portaobjetos.

Del mismo modo también llama la atención en el Hyundai Kona HEV la ganancia de volumen del maletero, con 466 litros (105 más que antes) sin perjuicio de la hibridación (en realidad cubica casi 480 reales) y unas formas muy cúbicas y regulares y un umbral de carga de no excesiva altura para un SUV (65 cm), con detalles como el alojamiento en vertical mediante presillas laterales de la bandeja cubreequipaje, para aprovechar el volumen hasta el techo, además del doble fondo (dos posiciones de altura de piso). Puestos a mejorarlo, no vendría mal una luz interior más potente y un revestimiento lateral decente, máxime cuando ya se dispone de apertura y cierre motorizado “manos libres” de portón (con 5 niveles de apertura).

 

Pero no podemos pasar por alto su excelente nivel de equipamiento desde niveles medios, trayendo de serie pantalla multimedia de 12,3”, cámara de visión trasera, climatizador bizona, llantas de aleación, alarma antirrobo, faros y pilotos de diodos, acceso y arranque sin llave, luces y limpiaparabrisas de activación automática…

Equipamiento que se mejora en el nivel N Line con detalles en negro (parrilla y retrovisores) y en color carrocería (pasos de rueda) además de llantas y paragolpes específicos, mientras que en el interior tapizados y molduras presentan detalles en rojo y negro y los pedales metalizados. Entre los pocos reparos que se le pueden hacer es la presencia dominante de plásticos duros.

También puede llevar un “head-up display” de gran área de proyección en el parabrisas (hasta 12”) y cuenta con 4 tomas USB-C (dos delante y dos detrás), además de una toma delantera de corriente continua a 12V. Los asientos, son ahora más compactos, pudiendo los delanteros ser los Confort Relax con ajuste eléctrico y memoria de posición en el del conductor. El arranque es por botón en toda la gama (con o sin “Smart Key” de acceso sin llave) pero sobre todo lo mejor es que trae aire acondicionado por climatizador automático bizona de serie en toda la gama.

Las dobles pantallas del salpicadero (cuadro y multimedia) incorporan el sistema de audio-video-navegación envolvente, y además, este Kona es el primer Hyundai dotado del Connected Car Navigation Cockpit, con unión de gráficos entre las pantallas. Y al aparcar, cuenta con cámara de visión perimétrica a 360º.

Hyundai Kona HEV: mecánica eficiente y sobria

A cambio de prescindir del diésel este nuevo Kona mantiene una gran oferta en gasolina, en especial la versión híbrida autorrecargable (HEV) probada de 141 CV con el mismo motor que la generación anterior, cambio automático DCT de 6 relaciones y tracción delantera. Homologa un consumo muy bajo, de entre 4,1 y 5,2 l/100 km WLTP, con un promedio combinado de 4,7 l/100 km, que además ha venido a coincidir casi con nuestras mediciones (4,8 l/100 km).

No arroja unas prestaciones especialmente brillantes (161 km/h de velocidad punta y 11 segundos en el 0-100 km/h) pero sí muy dignas y constantes. Es una mecánica muy silenciosa y con bajos (15 mkg de par máximo a 4.000 rpm) y aunque no muestra un tirón espectacular, responde muy bien dinámicamente con una respuesta firme y constante a las velocidades más corrientes (entre 80 y 130 km/h), luego se frena un poco aunque cumple con creces la velocidad máxima anunciada (supera los 161 m/h oficiales hasta lograr los 163, aunque al alcanzarlos el velocímetro muestra unos muy optimistas 180 km/h).

En conjunto se aprecia una neta mejora de reacciones, con una suspensión más progresiva, y un notable descenso de consumo (casi medio litro menos cada 100 km en promedio respecto al modelo precedente), mostrándose muy eficiente en las condiciones normales de conducción, sin dispararse tampoco si se practica una conducción deportiva (donde aumenta sólo un poco). Eso explica que pese a un pequeño depósito de gasolina (sólo 38 litros) pueda llegar a lograr casi 600 km de autonomía, y que incluso bajo una conducción muy tranquila pueda llegar a superar los 900 km.

El motor sin embargo no es tan pequeño; se trata de un biárbol multiválvula todo de aluminio, de carrera muy larga (72 x 97 mm) y 1.580 cc, un clásico 4 cilindros de alta compresión (13:1) alimentado por inyección directa y que entrega su máxima potencia a 5.700 rpm dentro de un nivel sonoro francamente envidiable. La ayuda eléctrica no es espectacular (32 kW, o sea 44 CV) pero añade otros 17 mkg de par que explican su gran respuesta en los regímenes intermedios (el km desde parado lo clava en 32 segundos, lo que no está nada mal para su tonelada y media de peso en orden de marcha). Y de este modo los 5 litros/100 km de consumo normal son perfectamente.

Nuestra unidad de prueba ha bajado en autovía a 120/130 km/h de crucero de reloj (unos 115/120 reales) de 5 litros (4,7) y en el turístico a 90/100 km/h se ha quedado en 4,4, eso sí en condiciones favorables de tráfico y sin carga… (rodando siempre en modo Eco). Pero es un consumo muy bueno que sitúa a este Hyundai Kona HEV entre los más frugales y económicos de todos los híbridos de su clase. Y eso con ruedas de 18” y neumáticos de 215/55 y cambio DCT automatizado de 6 relaciones

Quizá lo que menos nos haya convencido de este Kona HEV sea el cambio DCT, que trabaja un poco a su aire, con tendencia a elegir marchas largas (sobre todo en el modo Eco de los tres que tiene (Eco, Sport y Snow), este último para piso deslizante y en conducción “off road”) y lo peor, a menudo con un excesivo patinado de embrague. Parece ir un poco a su bola, sin tener en cuenta los deseos del conductor, que acaba interviniendo con las levas al volante para elegir la marcha deseada… Algo que choca un poco con la suavidad de un motor que apenas suena ni vibra. De los modos de conducción, el Eco es un tanto conservador, mientras que el Sport gestiona mejor la potencia sin que el consumo se desmadre, sobre todo en viajes largos por carretera.

Comportamiento: neta mejora

A la hora de valorar el comportamiento dinámico del nuevo Kona HEV debemos tener en cuenta que ya era muy bueno antes, lo que añade más valor a su mejora, con un notable avance en calidad de rodaje, aislamiento acústico y aplomo de marcha. Se le aprecia más estable y filtrado, y más firme de trayectoria, con una dirección que obliga a efectuar menos correcciones. La suspensión no es demasiado blanda, con una dureza intermedia que disminuye el balanceo de carrocería sin perjuicio del confort. Subvira bastante al iniciar la trazada en curva, pero luego la mantiene con el coche apoyado sin protestar. Si se fuerza demasiado empiezan a entrar en acción las ayudas electrónicas, y entonces se acabó la alegría, porque a menudo estas ayudas pueden resultar más perjudiciales que beneficiosas para el conductor avezado.

Porque como buen coche a la última moda, el nuevo Kona HEV viene cuajado de ayudas a la conducción, algunas útiles como el control de descenso en cuesta, o la frenada automática urbana con reconocimiento de peatones, o el sensor de presencia en el ángulo muerto, y otras menos útiles sobre todo si actúan anticipadamente o con retraso, como sucede con el control de velocidad activo (que actúa combinado con el sistema de mantenimiento de carril) o el lector de señales de tráfico y su molesto pitido cuando se supera (incluso levemente) los límites anunciados de velocidad.

Los frenos cumplen bien, progresivos y correctos y con un buen tacto al pedal. Nos ha gustado su respuesta ya desde las primeras frenadas, sin exigir calentamiento apenas, lo que puede también suponer una peor resistencia al trato duro, lo que en las actuales condiciones del tráfico nos parece secundario, y más en un coche de tipo familiar como éste. En resumen un coche cómodo y seguro, aunque preferiríamos una mejor selección de sus ayudas para priorizar las principales de las accesorias, sobre todo cuando son ultrasensibles: porque sin duda resulta molesto que el lector de cansancio de conductor te recomiende parar a tomar café cada dos por tres cuando acabas de coger el coche…

Excelente relación precio/ producto

En todo caso, este nuevo Kona ofrece mucho por su precio. No olvidemos que desde el nivel Maxx trae de serie un equipamiento digno del segmento superior, con asistente de mantenimiento y permanencia de carril (LKA y LFA), navegador con pantalla de 12,3”, conexión Apple CarPlay / Android Auto, Bluelink , climatizador automático bizona, llantas de aleación de 16”, sensores de aparcamiento delanteros y traseros con cámara de visión trasera, faros y pilotos de diodos, cambio automático de luces de cruce y carretera, llave inteligente con botón de arranque, sensor de luces y lluvia, control de crucero y limitador de velocidad (con cambio manual) o control de crucero inteligente (con cambio DCT).

Y luego el nivel N-Line añade sobre el Maxx llantas específicas de 18”, barras de techo, retrovisor interior electrocrómico y exteriores con plegado eléctrico, ajuste lumbar de asiento del conductor y de altura en el del acompañante delantero, lunas tintadas, aireadores traseros, aviso de presencia en ángulo muerto, asistente contra colisiones traseras (RCCA), asistente de salida segura (SEW), y soporte de carga inalámbrica de móviles.

En realidad el nivel N-Line se halla a la altura del máximo Tecno, que añade muy poco más (tapicería mixta piel/tela, luz ambiental configurable, portón automático, faros de diodos con banda frontal y asientos delanteros y volante calefactados)… También añade la llave digital NFC y el equipo hi-fi Premium Bose. Y de remate como máximo alto de gama, tenemos al N-Line Style probado que culmina la dotación del nuevo Hyundai Kona HEV con llantas de 18” específicas N-Line, diseño deportivo, cámara de aparcamiento 360º con sensor de aparcamiento lateral, tapicería mixta cuero / Alcántara, asientos delanteros Relax con ajuste eléctrico, ventilados y con memoria de posición en el del conductor, asientos delanteros y traseros calefactados, monitor de ángulo muerto, techo solar practicable y asistente de aparcamiento remoto RSPA (sólo en el HEV).

Prueba: Hyundai Kona 1.6 GDi HEV N-Line Style

Es un grado de equipamientos nada común en el segmento subcompacto de los SUV, con muchas ayudas a la conducción no disponibles en la mayoría de los demás B-SUV. Por ejemplo, todas las versiones traen de serie airbag central delantero (el que evita los choques entre ocupantes) así como el DSM (Driver Status Monitor), el sensor activo de cansancio del conductor. Y luego, el Hyundai Kona HEV puede equipar también ayudas como el Remote Smart Parking Assist (RSPA), asistente exterior para entrar y salir de las plazas de aparcamiento a distancia, o el monitor activo de ángulo muerto (BVM) que en caso necesario, frena el coche para evitar una colisión, y hasta un sistema que actúa sobre la dirección si detecta peligro de colisión en cruces o con un vehículo de frente. Sin olvidar detalles como el asistente inteligente de limitación de velocidad (ISLA) y el control de crucero inteligente (SCC) con cambio DCT.

En resumen, todo un despliegue tecnológico que explica que el precio de este Hyundai Kona HEV se sitúe ya en umbrales algo altos, llegando a los 40.690 € del N-Line Style (37.890 € con descuento por financiación), pero sin olvidar que tenemos al N-Line normal a 34.790 € y al Tecno a 36.790 €, e incluso al Maxx por debajo de 33.000 € (29.940 € con descuentos)… Precios muy competitivos para todo lo que ofrece un vehículo como éste.

Ficha técnica Hyundai Kona HEV

MOTOR: Posición Delantero transversal
Nº de cilindros y disposición 4 en línea
Cilindrada y cotas cilindro 1.580 cc – 72 x 97 mm
Combustible Gasolina 95 NO
Distribución Árbol de levas doble en culata
Válvulas (número) En culata (16)
Alimentación Inyección atmosférica directa
Relación de compresión 13 a 1
Potencia máxima 105 CV a 5.700 rpm
Par máximo 15,0 mkg a 3.600 rpm
MOTOR ELÉCTRICO  
Motor principal: Síncrono de imanes permanentes
Posición Delantero en punta del cigüeñal
Potencia – par 32 kW / 44 CV – 17,3 mkg
Batería (capacidad) Ion-Litio (1,56 kWh)
Tensión (voltios) 240 V en CC
Potencia total conjunta (motor de combustión + motor eléctrico) 141 CV
Par motor máximo conjunto 27 mkg
TRANSMISIÓN Tracción delantera
Embrague Doble DCT en seco
Nº de velocidades 6
SUSPENSIÓN  
Delantera Independiente por eje pseudo MacPherson, muelles helicoidales, amortiguadores hidráulicos telescópicos y barra estabilizadora.
Trasera Independiente por eje multibrazo, muelles helicoidales, amortiguadores hidráulicos telescópicos y barra estabilizadora.
Frenos delanteros Discos ventilados (284 mm)
Frenos traseros Discos macizos (280 mm)
Dirección / diámetro de giro Cremallera asistida eléctricamente / 10,6 m
Vueltas de volante 2,4
RUEDAS (marca neumáticos) 215/55 VR18 (Kumho Ecsta PS71)
Llantas Aleación (7,5 x 18”)
CARROCERÍA: Tipo (nº de puertas) Berlina dos volúmenes (5)
Longitud / anchura / altura 4,39 / 1,83 / 1,59 m
Batalla – Vías delantera/trasera 2,66 – 1,58 / 1,56 m
Nº plazas – Peso oficial 5 – 1.485 Kg
Maletero – depósito combustible 466 / 1.300 – 38 litros
RENDIMIENTOS OFICIALES  
Velocidad máxima 161 km/h
Aceleración De 0 a 100 km/h 11 segundos
Consumo mixto (WLTP) 4,6 l/100 km
Emisiones CO2 (WLTP) 105 g/km
PRECIO DE VENTA AL PÚBLICO: 40.690 euros
GARANTÍA: 5 años sin límite de km