J. Robredo
Novedad en el CES de Las Vegas
El marco elegido por Peugeot para presentar su Inception Concept ha sido el muy apropiado CES de Las Vegas de 2023, bajo el diseño de una berlina muy baja de cuatro puertas que anticipa soluciones tecnológicas y de diseño de su próxima generación de modelos eléctricos.
El nombre de Inception (tomado del latín “inceptium”, que además de comienzo o principio también significa proyecto) ha sido elegido como símbolo de la nueva era del automovilismo sostenible que avanza el grupo Stellantis a través de cuatro plataformas de vehículos eléctricos que representan una nueva filosofía de diseño, junto a nuevas tecnologías y prestaciones motrices que se plasmarán en nuevos modelos de producción en serie a partir del 2025, y del que este Peugeot Inception Concept surge como pionero del camino a seguir, bajo un concepto que pretende ser el mayor cambio de futuro para la marca francesa, como prototipo del nuevo lenguaje de diseño de su próxima generación de vehículos eléctricos.
Peugeot Inception Concept: un gran sedán futurista
Con 5 metros de largo por sólo 1,34 m de alto, el Peugeot Inception Concept está construido sobre la nueva plataforma STLA Large de Stellantis, una de las cuatro dispuestas como BEV-by-design: con una extraordinaria amplitud interior (aunque sólo para cuatro plazas) presenta rasgos comunes a otros “concepts” de la marca como el Peugeot e-Legend de 2018, destacando sobre todo su imponente superficie acristalada, con un parabrisas muy avanzado de casi 7,25 metros cuadrados, en suave caída del techo al frontal del coche, y dotado además de un tratamiento multicromo, con cierta inspiración en uno de los más bellos prototipos realizados por Peugeot, como fue el precioso Oxia de 1988, difuminando sus límites entre el diseño exterior e interior.
Así, este “concept” pese a su radical diseño tiene algo de superdeportivo “ochentero”, pero con rasgos angulosos muy actuales, como su parrilla en un panel de vidrio y su nueva firma luminosa diurna Fusion Mask, con la triple garra de la marca por delante y por detrás, y un logo iluminado con efecto en 3D.
La vista lateral destaca la franja Tech Bar de la puerta (que puede mostrar mensajes al conductor) y las enormes llantas de 20” de diámetro, similares a las del 408 pero con el detalle de ofrecer fijo en su núcleo el emblema iluminado del león, sin girar como las ruedas, que diseñadas bajo una simetría axial, llevan insertos textiles para mejorar su aerodinámica junto a otros en aluminio para realzar su diseño.
En todo caso, lo más llamativo es la imagen estática del logo del león en su cubo mientras el coche rueda, junto al predominio de la superficie acristalada, frontal y lateral formando parte de su diseño, sobre una carrocería que también tiene un sombreado compuesto por pigmentos metálicos ultrafinos.
Eléctrico, ¡cómo no!
Desde el punto de mecánico, su configuración motriz corre a cargo de dos motores eléctricos (uno por eje) capaces de generar hasta 500 kW de potencia (680 CV) a sus 4 ruedas, y con los que acelera de 0 a 100 km/h en menos de tres segundos, aunque lo más interesante es su batería de 100 kWh, capaz de permitirle una autonomía de 800 km (más incluso que el Mercedes EQS, cuya berlina anuncia 743 km de autonomía máxima), gracias también a un bajo consumo energético (solo 12,5 kWh/100 km, según Peugeot).
Y a la hora de recargarla, este Inception Concept puede recurrir no sólo a la conexión por cable, sino también a la carga por inducción sin cable, siempre compatible con su tensión a 800 voltios. En todo caso la rapidez es máxima, ya que la batería puede cargar el equivalente a 30 km de alcance en un minuto, y si se prolonga la carga hasta los 5 minutos, la autonomía aumenta hasta los 150 km (aunque Peugeot no indica las características de la estación de carga, que se supone de máxima capacidad).
Interior tecnológico
Las puertas de apertura enfentadas y sin pilar central dan acceso a un amplio interior, y como buen eléctrico, el Inception ofrece un salpicadero de lo más despejado, sin cuadro de instrumentos, ya que lo que correspondería a éste se despliega por la parte baja, con un “cockpit” a tamaño reducido pensado para conducir el vehículo como si se tratase de un videojuego (el “Clúster Halo”). El volante convencional da paso a otro rectangular denominado Hypersquare, con una pantalla central tipo “tablet” con ventanas circulares de control en las esquinas, pensadas para ser activadas táctilmente con los pulgares, un dispositivo muy “concept” del que Peugeot afirma que formará parte del equipamiento de un coche de serie a fines de esta década…
La novedosa dirección eléctrica se conecta al eje delantero directriz mediante cable, sin conexión mecánica. Esta combinación “Hypersquare + Clúster Halo” es la que da paso al conjunto de cuadro de mando y pantalla flexible con los datos de conducción, donde durante la transición al nivel L4 de conducción autónoma delegada (STLA Auto Drive), el Hypersquare se retira, y una pantalla panorámica surge desde el suelo.
Por lo demás, destaca el gran espacio del habitáculo y el cuidado puesto en el confort, subrayado por la tapicería anatómica de terciopelo, con asientos que se adaptan y reconocen la forma del conductor y los pasajeros. En definitiva, un ejercicio de estilo, diseño y soluciones tecnológicas que anticipan los futuros modelos eléctricos de la marca… y mucho más.