Mini Countryman

13 noviembre, 2010

La nueva variante de carrocería, más alta y con los pasos de rueda abultados, va a permitir al ya no tan pequeño modelo ser una opción (exclusiva, como siempre) para aquellos que desean tener un Mini pero que su escasa capacidad de maletero se lo impedía, y tampoco el “extendido” Clubman cumplía sus expectativas. Son ya 4,10 cm de largo (14 cm más que el Clubman y 40 más que el Mini normal) para alojar hasta 5 ocupantes, pero ya con algunos problemas de espacio en las plazas traseras. No en vano son 13 cm más de batalla y altura, además de ser 11 cm más ancho.

Siempre original, la configuración inicial de asientos es de 4 plazas individuales separadas por un carril central denominado “Centre Rail”, que llega hasta las plazas traseras a modo de consola central a la que se le puede incorporar diferentes módulos portaobjetos, desde un portagafas a una neverita y hasta juegos de entretenimiento, pasando por los clásicos apoyabrazos centrales. En configuración 5 plazas (opción sin coste), este rail no llega a las plazas traseras.

El maletero gana 90 litros respecto al Clubman (190 más que el Mini normal) alcanzando ya unos suficientes 350 litros de capacidad (similar a la de un VW Golf). Pero la versatilidad interior de los asientos de las plazas traseras permite ampliarla, ya que pueden desplazarse longitudinalmente 13 cm de forma individual, facilitando aumentar la capacidad de carga en 100 litros. Además, si abatimos los respaldos (también regulables en inclinación) se puede llegar hasta los 1.170 litros.

La concepción todocamino del Countryman, con 14,9 cm de altura libre al suelo y llantas de 16 a 18 pulgadas, le capacita para llevar en exclusiva, en sus variantes Cooper S y Cooper D, la tracción total ALL4. Se trata de un diferencial central multidisco situado en posición trasera que distribuye continuamente hasta un 50% del par a las ruedas traseras de forma electromagnética, pudiendo llegar al 100% en situaciones extremas.

Este tipo de tracción resulta muy útil en asfaltos resbaladizos o por pistas y caminos por su rapidez de respuesta. Aunque todas las versiones llevan el control de estabilidad DSC de serie, las variantes ALL4 (y el Cooper S tracción delantera) disponen también del control dinámico de tracción DTC y una función del bloqueo electrónico del diferencial del eje delantero.

El apartado mecánico (5 motores) conserva las tradicionales denominaciones y potencias de la gama Mini, empezando por los gasolina One (98 CV), Cooper (122) y Cooper S (184 CV), este último con inyección directa, turbocompresor y distribución variable. En diesel rompe con los mo-tores franceses de PSA y estrena el nuevo motor BMW de sólo 1.598 cc, una evolución del bloque 2 litros de la marca, realizado en aluminio, que se sitúa en este caso en posición transversal. Y al igual que el anterior de PSA se desdobla en dos potencias de 90 (One D) y 112 CV (Cooper D), con menores emisiones de CO2 (115 g/km) y consumo medio (4,4 l/100 km).

Todas las versiones llevan de serie caja manual de 6 velocidades (en breve también automática para los gasolina), el sistema de arranque-parada Auto Start-Stop, indicador óptimo de cambio de marcha y los sistemas de desconexión automática de los grupos secundarios que garantizan el menor consumo (el depósito de combustible es de sólo 47 litros). La prueba de conducción se realizó con las versiones Cooper en diesel y gasolina, muy ágiles y suficientes para mover con soltura esta carrocería más pesada, aunque la versión diesel posee mejores recuperaciones y mayor empuje a bajas revoluciones.

Hay que destacar su excelente dinamismo y la buena insonorización del habitáculo (por los materiales aislantes y los marcos en las ventanillas), aunque su condición deportiva deja escuchar bien el sonido del motor. Las suspensiones son confortables y aunque permiten el balanceo de la carrocería, no es excesivo y la estabilidad y agrado de conducción deportiva (con su dirección muy directa) destacan como siempre. Puede obtenerse más rigidez con suspensióndeportiva que reduce la altura 1 cm (de serie en el Cooper S).

Ya a la venta desde el pasado mes de julio a partir de 20.800 euros y en once colores más las combinaciones de techo, las primeras unidades se empiezan a entregar a finales de septiembre en los concesionarios, disponiendo como es natural en la marca, de una amplia gama de opciones de personalización, con tres tapizados y hasta 11 llantas distintas (algunas en negro).

Versiones del modelo: 'Mini'