Una solución muy real
El segmento de las furgonetas eléctricas de tamaño compacto para el reparto urbano son las más indicadas para utilizar la energía eléctrica como única fuente de movimiento. Tienen un tamaño y peso limitados y no están pensadas para largos recorridos, ni se caracterizan por su capacidad para transportar objetos pesados…
Estas furgonetas no precisan de elevada potencia que les permita generosas prestaciones y tampoco son excesivamente caras, a lo que ayuda su bajo mantenimiento, dado la ausencia de una serie de elementos de los que carece (embrague, filtros, aceite, etc).
Todos estos argumentos son los que han llevado a PSA (Peugeot y Citroën), líder europeo en vehículos comerciales ligeros a desarrollar sus vehículos eléctricos puros, realizados sobre las bases ya conocidas de las Citroën Berlingo y Peugeot Partner, con los que pueden luchar en un segmento que poco a poco se irá completando con vehículos de todas las marcas (también están en el mercado la Renault Kangoo Z.E. y la Nissan e-NV200).
Si el precio de adquisición es más elevado que las convencionales animadas por motores térmicos, los alquileres y otros sistemas de compra los hacen más accesibles para las empresas, mientras que el coste de utilización los permite aumentar su competitividad en lo que se refiere a costes de energía y su influencia en los gastos a trasladar al cliente. El precio de compra de este tipo de furgoneta eléctrica se mueve entorno a los 24.000 euros con las ayudas del Estado incluidas de 5.500 €(Plan Movea).
Citroën Berlingo y Peugeot Partner.- Estos dos modelos de comerciales ligeros forman parte de uno de los segmentos que en la actualidad desde 2015, está experimentando mes a mes un gran crecimiento, debido a la recuperación de sus ventas a las que tanto dañó la crisis pasada, siendo el Berlingo el modelo más vendido en España.
En cuanto a los dos representantes eléctricos de PSA se fabrican en exclusiva para ser distribuidas por toda Europa en la factoría que el grupo tiene instalada en Vigo. Utilizan la misma cadena de montaje para los vehículos convencionales, con una cadencia de fabricación que comenzó con únicamente 12 unidades diarias, lo que da una producción anual en 2015 de 2.000 vehículos, de los cuales apenas 60 unidades se destinaron para nuestro mercado.
Están disponibles en dos versiones de carrocería (normal y larga) con una longitud de 4,38 y 4,63 m respectivamente. Y en cuanto a su estructura tiene ligeros retoques para recibir el motor eléctrico, pero sobre todo las baterías, que se sitúan en dos grupos, por delante y por detrás del eje posterior. Estas baterías de origen Mitsubishi se montan en conjuntos también en fábrica. Tiene un rendimiento de 25 Kw/h y añaden 175 kg extras (145 kg el grupo de acumuladores trasero y 30 kg el delantero), con un peso total en vacío de 1.664 kg. El motor eléctrico, que también llega directamente desde Japón, tiene una potencia de 67 CV (49 KW) y proporciona un par máximo constante de 200 Nm que se aplica a las ruedas delanteras. El cambio de marchas, si es que se puede llamar así, es de una sola relación como en todos los vehículos eléctricos.
La autonomía anunciada tanto para el Partner como para el Berlingo es de 177 km, aunque la realidad es que varía y mucho dependiendo de la carga que se transporte y también del tipo de conducción que se realice o de la carretera por la que se circule. A tope de carga (695 kg permitidos), esta autonomía se reduce considerablemente y, sobre todo, si circulamos por autovía a buen ritmo. El tiempo de recarga en un enchufe convencional varía entre 8 y 15 horas, recuperando el 80 por ciento de la energía en sólo 30 minutos si utilizamos un enchufe industrial (400 V).
Además de los elementos eléctricos obligatorios, se ha perfeccionado el sistema de recuperación de energía en fase de deceleración y también de frenada, convirtiendo esta energía cinética en carga eléctrica que se almacena en la batería, aumentándose así ligeramente su autonomía. En este aspecto influye mucho el tipo de conducción, siendo mucho más indicado una conducción pausada y tranquila.
En cuanto a las condiciones de carga, además de por las puertas laterales correderas, existe la posibilidad, de cargar un euro palet, que se puede introducir por la doble puerta posterior. El volumen interior disponible llega hasta los 3,3 m3 (1,35 m3 en la Combi) y gracias al asiento Multi-Flex, que permite llevar una tercera persona en las plazas delanteras o eliminarlo, se puede disponer de un espacio de hasta 3 m de largo. Este asiento central delantero se puede convertir también en una práctica mesa para trabajar, y bajo la banqueta se esconde un espacio de 7,6 litros que puede cerrarse con candado.
La seguridad también ha sido especialmente cuidada en este vehículo eléctrico, que dispone de control de estabilidad y de tracción, asistente al arranque en pendientes, cinturones de seguridad con pretensores y limitador de esfuerzo, dirección asistida, volante regulable en altura y profundidad, cierre centralizado y panel separador de carga, entre otros elementos.