Jorge Fernández
Con menos materiales de alta demanda
La marca del óvalo anuncia que este año reemplazará en todos su modelos de producción eléctricos las baterías de iones de litio por otras más duraderas de fosfato de hierro y litio (LFP), siendo el Ford Mustang Mach-E el primer modelo en beneficiarse de esta nueva tecnología.
Estas nuevas baterías de LFP emplean menos materiales de alta demanda cuya escasez está dando tantos problemas a la industria automotriz, en plena expansión eléctrica. Además, entre sus propiedades destacan que ofrecen una alta durabilidad, se pueden cargar de forma más rápida y el nivel de carga es mayor respecto de las baterías actuales a base de níquel, cobalto y magnesio, empleadas en los e-Transit, F-150 Lighting y Mach-E, .

Los materiales utilizados también son de menor coste que los que normalmente se usan, por lo que se podrán ofrecer modelos eléctricos más asequibles además de con una mayor fiabilidad.
Para construir estas baterías, Ford ha anunciado una inversión de 3.500 millones de dólares para un planta especializada en estas baterías LFP en Estados Unidos, con el nombre de BlueOval Battery Park Michigan, y que estará operativa para 2026. Para finales de ese mismo año, la compañía norteamericana pretende alcanzar una producción anual de 2 millones de vehículos eléctricos en todo el mundo, partiendo en la actualidad de 600.000 vehículos (estimados a finales de este año).
El primer modelo en utilizar estas nuevas batería de LFP será el Ford Mustang Mach-E, pero no será el único, ya que este tipo de baterías se pretende utilizar en la totalidad de la gama eléctrica de Ford. Este año se montarán en el Mustang, en 2024 llegarán al F-150 Lighting, y más tarde se irán anunciando otros modelos.