Nissan Qashqai 1.5 dCi, fundido de biela

3 marzo, 2014

Hace ya dos números tratamos la alarma despertada en algunos usuarios por una avería recurrente de fundido de biela en algunos motores turbodiesel 1.5 dCi montados en modelos Nissan. En concreto nos hicimos cargo del problema de una lectora, registrado en su Nissan Qashqai. Puestos al habla con el responsable de prensa de Nissan, nos dice no tener constancia de ninguna reclamación de nuestra lectora por la citada avería, y en efecto, la misma nos lo confirma en un posterior correo electrónico en el que nos dice que “entiendo que no tengo derecho a reclamar, ya que mi última revisión no la pasé en un centro autorizado Nissan. Sólo quería poner en conocimiento del público mi situación, y ver si esto mismo me puede volver a suceder, ya que he sustituido el motor por otro de segunda mano con menos kms, pero posiblemente mi miedo es que presente el mismo problema potencial, según lo indicado en los siguientes foros”. Y nos facilita los siguientes “links”: https://www.facebook.com/roturabielamotoresdci, y http://mundoqashqai.foroactivo.com/t11041-afectados-rotura-casquillos-de-biela-motores-dci.
Patricia Sáenz de Tejada (Madrid, correo electrónico)

Nissan_Qashqai

Respuesta.–A nuestro juicio, entendemos que si se trata de un defecto original del motor, los usuarios tienen derecho a reclamar, incluso si el mantenimiento no ha sido realizado en los talleres de la red oficial de la marca, siempre y cuando se atestigüe el tipo de fallo y sin causa aparente y más si es frecuente. El departamento de prensa de Nissan España ruega a nuestra lectora que se ponga en contacto con ellos a fin de darle una respuesta adecuada, y eso es lo que le sugerimos. En todo caso, y tras entrar en las citadas direcciones de Internet y tratar el tema en algunos talleres, sí parece haber un problema de fragilidad de casquillos de biela en algunas series de estos motores (en especial en los 105 CV, aunque hay casos de los tres), bien sean de Nissan, Dacia o Renault.
Lo mejor es asegurarse si nuestra unidad monta estos casquillos, y proceder a cambiarlos sobre todo si el vehículo se aproxima o supera los 100.000 km de recorrido. No es un problema de calidad de aceite sino de desgaste prematuro del metal duro antifricción y cuando aparece la capa de cobre el mal ya está hecho. Hay diversas hipótesis para explicarlos, aunque a nuestro juicio la más plausible es que el casquillo llega a girarse en su soporte, obstruyendo el oficio de engrase con que cuenta, provocando este desgaste acelerado.