El 1 de agosto concluyó el proceso de integración de Porsche AG en Volkswagen, bajo el que Porsche SE (Porsche Automobil Holding SE) aporta al grupo VW el 50,1% de su participación en Porsche AG, con lo que VW controla el 100% del capital de Porsche a través de una “holding” intermediaria. El valor del traspaso son 4.490 millones de euros, a cargo del valor patrimonial de las acciones restantes (3.880 millones) junto a otros activos de ajuste. Porsche será retribuída por los dividendos que habría recibido por su participación indirecta en Porsche AG, así como con la mitad del valor neto actual de las sinergias conseguidas tras la integración (unos 320 millones de euros). Ambas compañías mantendrán estrategias conjuntas, pero Porsche conservará su propia identidad e independencia operativa, como el resto de las marcas del grupo VW.
