Toyota Yaris

19 junio, 2014
LUIS URBINA

La generación “X”
Con un frontal “cruzado” marcando una “X” (la nueva imagen de Toyota), siguiendo la pauta de un diseño basado en la creación de una imagen potente con prioridad a la zona inferior del coche, la marca nipona realizará para septiembre un avanzado “restyling” equipándole con cuatro versiones.
Toyota ha buscado un nuevo estilo para su utilitario polivalente que crece de 3,89 m a 3,95 m por los nuevos paragolpes, manteniendo el ancho (1,70 m) y la altura (1,51 m). En el frontal hay una separación de parrillas (una arriba y otra abajo muy grande) mientras que la zaga estrena nuevos pilotos con lámparas de diodos, un nuevo difusor en el parachoques y se modifica la zona de la matrícula.

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Por dentro aumenta la sensación de amplitud y el nivel de calidad percibida, ampliándose la oferta de colores, opciones y equipamiento. Se ha revisado la suspensión para mejorar tanto el confort como el comportamiento, equipando de serie llantas de 15” y hasta 16” de diámetro, reduciendo el ruido mecánico y de rodaje, al tiempo que la oferta motriz se centra en los Yaris 70 y 100 en gasolina (el primero con el tricilíndrico 1.0 de 70 CV y el segundo con el tetracilíndrico 1.3 de 100 CV), manteniéndose el diesel 1.4 D-4D de 90 CV.
Los motores de gasolina 1.3 VVT-i (100 CV) y el 1.4 D-4D diesel (90 CV) traen algunas modificaciones para reducir el ruido y vibraciones: por una parte, el empleo de una barra de torsión delantera en el anclaje del motor (en el diesel) y por otra un mejor aislamiento del escape. El 1.0 de 3 cilindros (998 cc) ha sido sometido a una importante renovación con vistas a mejorar su rendimiento, rebajando emisiones, ruido y vibraciones. Más compacto en su colector de escape, es más ligero y sube su compresión a 11,5:1, con una recirculación de gases de escape ampliada y “stop & start” de serie.

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Tampoco hay novedad en el Yaris híbrido, que une como antes el mayor motor de todos (el 1.5 VVT-1 gasolina de 90 CV) a un motor eléctrico de 45 KW de punta máxima, con un rendimiento conjunto bastante bajo (sólo 100 CV) ya que la potencia normal del eléctrico no pasa de los 19,3 Kw (26 CV) y las pérdidas de superposición deben ser bastante altas. Eso sí, anuncia un consumo combinado de 3,3 lts/100 km (75 grs/km de CO2), el mejor de la gama y algo inferior al del actual Yaris híbrido (3,5 lts y 79 grs/km de CO2).
Se ha mejorado mucho el aislamiento y los niveles de ruido y vibraciones. De serie (desde el nivel Active) todos vendrán con aire acondicionado y sistema multimedia Touch 2, y luego en opción o en los niveles superiores veremos ya detalles como los faros con proyectores, llantas de aleación, cámara de visión trasera, retrovisores con plegado eléctrico, control de crucero, climatizador bizona, elevalunas eléctricos traseros, sensores de lluvia y luz, acceso sin llave con botón de arranque, tapicería en Alcántara y piel, etc.
El cuadro de mandos superior es ahora más estrecho, con un salpicadero más horizontal, y la superficie superior de los indicadores rediseñada para proyectar una imagen más estilizada. Al mismo tiempo, los paneles de puertas también se han renovado, con una zona blanda más amplia y funcional. La consola central se eleva 2,3 cm y la palanca de cambio se acorta en otros 3 cm, quedando más a mano del conductor, y dejando hueco para un nuevo hueco portaobjetos. La pantalla táctil aumenta de tamaño (de 6,1” a 7”), y el acabado del cuadro de mandos superior cambia su tipo de granulado, con un tacto más agradable y menos brillante.

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La capacidad del maletero permanece (286 litros) pero la suspensión trasera se modifica con un nuevo eje torsional más rígido junto a unos muelles más blandos, con mayores topes de suspensión en poliuretano. De este modo, mejora el confort de marcha a la vez que disminuye el desplazamiento de la carrocería, mejorando la proporción de agarre entre la parte delantera y trasera del vehículo, para reducir la tendencia al subviraje. Delante se montan también muelles más blandos que potencian el confort de marcha, al tiempo que se introducen resortes de rebote en el interior de los amortiguadores para aumentar la rigidez al desplazamiento anterior, con lo que disminuye el balanceo y cabeceo de la carrocería en curva.
Por último, el nuevo sistema de control de la dirección asistida eléctrica aprovecha la mayor rigidez de carrocería y las mejoras de la suspensión para aumentar su sensibilidad de respuesta. En resumen, un considerable repaso que vuelve a poner al Yaris en el mapa de los más codiciados utilitarios polivalentes del mercado europeo, con sensibles mejoras de equipamiento que no deberían notarse demasiado en su tarifa, al menos si Toyota pretende mantenerlo entre los más vendidos de su clase. En septiembre lo sabremos.

Versiones del modelo: 'Yaris'

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