Últimamente la marca de Hiroshima se está especializando en lanzar algunos “concepts” ya muy elaborados, como última forma de dar a conocer lo que será el modelo definitivo de calle que se derivará de ellos. Es el caso del Shinari, del Minagi y posiblemente de este Takeri, que como todos los demás Mazda de última generación viene envuelto en la poética parafernalia conceptual nipona (en este caso el inefable “kodo”, o sea alma en movimiento) y por supuesto dentro de la etiqueta tecnológica de los nuevos Mazda, o sea el SkyActiv, que engloba todas las fórmulas de ayuda a la reducción de emisiones (regeneración de energía en la frenada “i-ELOOP”, sistema “start / stop”, en este caso el i-stop de Mazda que simplifica el proceso mediante el pre-cebado del cilindro que debe arrancar primero, etc).
Sin demasiados datos todavía, se puede anticipar que este Takeri ofrece un diseño clásico de berlina tres volúmenes y 4 puertas bajo un estilo muy deportivo de “coupé de 4 puertas”, continuidad del mostrado en el “concept” Shinari, con un morro largo y abombado y abultados pasos de rueda, y con el fundido entre las “cejas” de los faros y el perfil de la parrilla pentagonal de la marca que marcan las últimas realizaciones de Mazda.
Estrena una nueva plataforma de 2,83 m de batalla, con el mismo esquema de suspensiones ya conocido en el “6”, o sea eje MacPherson delantero y multibrazo posterior. La tendida caída posterior permite inferir que en el posterior desarrollo de calle tendremos como ahora versiones de 4 y 5 puertas (o sea, con tapa de maletero independiente y con portón trasero), y que la habitabilidad no será mucho mayor, dadas las similares proporciones y las formas más afiladas de la carrocería, que apunta más hacia un “coupé de 4 puertas”, en el estilo del anterior “concept”, el Shinari. Aún así sus medidas no son nada compactas (4,85 m de largo por 1,87 de ancho y 1,43 de alto). El acento está puesto sobre todo en un diseño dinámico que sugiere potencia y deportividad, con un diseño que busca emular más el segmento H que el D.
Diseñado en principio sólo para 4 plazas, el interior recrea unos acabados y terminaciones de gama alta, con un panel superior de salpicadero que se continúa hasta las puertas, y una sección inferior en forma horizontal. La tapicería mullida y espesa parece integrarse en el mismo bastidor, prolongándose horizontalmente desde los laterales de los pasajeros hasta el panel central, con una sensación de confort que marca la diferencia esencial entre este Takeri, más berlina que coupé, y el Shinari, más coupé que berlina, aunque ambos mantengan la estructura tricuerpo con 4 puertas laterales.
Técnicamente Mazda no ha facilitado apenas información del Takeri, pero sabemos que es un tracción delantera con el motor SkyActiv turbodiesel 2.2, muy optimizado desde el punto de vista de las emisiones gracias al perfeccionamiento del i-ELOOP (lo que reduce las necesidades eléctricas al mínimo y ayuda a reducir el consumo) y con el original sistema “stop/start” de Mazda, el “i-stop” que resulta de especial interés al ser adaptado específicamente en un motor diesel, al suavizar mucho su arranque por compresión única.
Este encendido por compresión reduce las exigencias impuestas a la batería y al motor de arranque, durante el arranque posterior al corte de ralentí. Con ello se reduce el consumo innecesario de gasóleo y se logra un superior rendimiento medioambiental, con un arranque más suave y rápido.
Este sistema “i-stop” supone un avance importante dentro de los “stop/start” para diesel, y contribuirá sin duda a popularizar su introducción en los motores de combustión interna, siendo sin duda la innovación técnica a nivel motriz más importante que veremos en el sucesor del Mazda6.
Por lo demás, este Takeri presentaba varios rasgos de “concept” que seguramente no veremos en el futuro modelo de calle, salvo en sus variantes más deportivas, como los discos de freno ventilados en las 4 ruedas o las tremendas llantas de 20” de diámetro (y 9,5 de anchura) con neumáticos de 245/40 R20. Lo que no quita para que en esencia resulte un “concept” ya maduro y viable, que resume la esencia principal que encarnará el modelo final que reemplace a un coche de tanto éxito para Mazda como es su berlina 6, y que aunque todavía no hay calendario oficial de posible sucesión, todo indica que llegará para 2013.
