Los frenos de los vehículos eléctricos

26 febrero, 2024
Javier Gete

Con mucha tecnología por sus especiales exigencias

Es evidente que los frenos de los vehículos eléctricos precisan de sistemas específicos al ser más pesados por sus baterías, con pares de giro mayores y poseer una aceleración más rotunda, por lo que en parte se genera un mayor desgaste de los discos y las pastillas a pesar de su menor implicación en comparación con los vehículos térmicos, debido a la frenada regenerativa con la que cuentan.

De hecho los estudios de expertos hablan de un 20% menos de intervenciones de los frenos en vehículos eléctricos, lo que supone que las pastillas de freno no se exponen a un mayor desgaste, pero las pastillas tienden a envejecer más rápidamente y se pueden llegar a formar óxidos en los discos de freno, cosa que podría generar vibraciones y ruidos de rozamiento muy molestos.

Los frenos de los vehículos eléctricos

Sólo algunas marcas ofrecen en sus gamas todos los tipos de electrificación actuales, siempre con sistemas de recuperación de energía en la frenada y desaceleraciones.

En los vehículos eléctricos, al ser tan silenciosos, los ruidos se escuchan mucho más, mermando el confort de conducción, además de la potencial reducción de rendimiento del sistema de frenada, ya que al no calentarse suficientemente las pastillas de freno se pueden producir degeneraciones de su material, y es por ello que se recomiendan inspecciones y mantenimientos periódicos del sistema de frenos en los vehículos eléctricos y electrificados.

Los vehículos eléctricos con frenado seguro

En los vehículos eléctricos la frenada se produce usando el sistema de frenado clásico conjuntamente con la función de recuperación de energía dándose muchas situaciones en las que el vehículo frena sin uso del freno mecánico, y esto que parece sencillo precisa de una muy compleja interacción entre los componentes hidráulicos y eléctricos, ya que la electromecánica debe reconocer de forma inmediata los deseos del conductor en cada momento.

Para ello actúan en paralelo un servofreno electromecánico con acumulador de presión, una bomba de vacío eléctrica y el codificador del pedal de freno, calculando así la unidad de control del freno la fuerza necesaria de frenado en milisegundos, y aplicando la misma, aplicando los frenos mecánicos a partir de una determinada fuerza de frenado.

Los frenos de los vehículos eléctricos

Muy importante contar con sistemas de frenado en todos sus componentes con gran calidad y fabricados por marcas de reconocido prestigio en su concepción.

A todo esto hay que añadirle el control inteligente del ESP y del ABS, así como la operatividad del asistente de frenada de emergencia, consiguiendo una interacción perfecta entre todos los sistemas.

Pastillas y discos de freno especiales para vehículos eléctricos

A primera vista no hay diferencias entre estos componentes y los de los vehículos de combustión, si bien no son iguales en absoluto, ya que las pastillas para coches eléctricos centran todo su desarrollo en ser extremadamente silenciosas y de baja o nula vibración, y algunas veces son incluso más delgadas (superficie de fricción más pequeña y fina por su menor frecuencia de uso), consiguiendo ahorros de material de cara al medio ambiente.

Por ejemplo, las pastillas de freno de los híbridos y eléctricos son sin contenido de cobre y se producen con una mayor compresibilidad con coeficientes de fricción más elevados, buscando una frenada efectiva incluso cuando están frías.

Pastilla para coches eléctricos

En algunos casos, siempre en función de la mayor potencia de algunos modelos, los discos de freno se mejoran en cuanto a contenido de carbono, que permite una rápida disipación del calor, un debilitamiento reducido y un menos ruido de frenado. Solo algunas marcas aseguran contar con sistemas de frenada súper eficientes y adaptados a las necesidades de sus eléctricos y electrificados, cosa que conviene verificar a la hora de adquirir un vehículo de estas características.

También los líquidos de freno son especiales con un punto de ebullición en seco más elevado y en húmedo para los vehículos eléctricos.

Los frenos de los vehículos eléctricos

Euro 7: cambia el registro de emisiones de partículas de polvo fino, con valores máximos de referencia

Será a partir de 2025, con la entrada en vigor de la norma Euro 7, cuando los fabricantes de pastillas de freno para turismos (térmicos y eléctricos) deberán adaptarse al respeto de unos valores determinados de emisiones de partículas de polvo fino, por lo que la industria trabaja en la búsqueda de componentes para mezclar y que sean compatibles con el medio ambiente.

La medición de estas emisiones se realiza bajo el procedimiento de ensayo uniforme WLTP (Worldwide Harmonised Light Vehicles Test Procedure), midiendo así en el futuro de manera uniforme y comparable las emisiones en los bancos de prueba, donde también se medirán con precisión la combinación de las pastillas y el disco de freno en función del peso del vehículo y su distribución, para así estudiar el comportamiento de desgaste.

Para poder superar estas exigentes pruebas es siempre conveniente contar con recambios del máximo nivel cualitativo en el mercado, al tratarse del más importante sistema de seguridad con que contamos en la conducción.

En definitiva, los vehículos eléctricos además de producir muchas menos emisiones, sea de gases de escape inexistentes, de menor generación de ruido, y de emisiones de polvo de freno, en general se puede afirmar que son más limpios que los vehículos de combustión tradicionales durante su periodo de vida operativa, independientemente de los estudios que consideran toda su vida útil (desde materiales, producción, operatividad, y muerte con reciclado) a la hora de evaluar su auténtica implicación global sobre el medio ambiente.