Los diversos tipos de frenos

18 abril, 2023
Javier Gete

Funcionalidad de las pastillas y discos de freno

No cabe duda de que el sistema de freno es un elemento fundamental de cara a la seguridad de los vehículos, con la función de reducir la velocidad o detener el vehículo totalmente, pero no todos los frenos son iguales, repasando aquí, los diversos tipos hoy en día fabricados.

A lo largo de su historia, el sistema de frenado ha venido evolucionando de manera constante y espectacular para pasar de un sistema rudimentario a ser el resultado de una sofisticación tecnológica elevada, ya sea por sus elementos mecánicos o por los controles electrónicos que lo acompañan.

Los diversos tipos de frenos

Pero para conseguir buenos resultados de la frenada, es necesario garantizar las buenas prestaciones de las pastillas de frenos, recomendando recurrir a marcas que aporten recambios de calidad para conseguir un funcionamiento adecuado del sistema de frenado.

Los tipos de frenos existentes actualmente

  • Frenos de disco: que son los más comunes debido a su indudable eficacia, a pesar de ser más caros y menos duraderos, y básicamente realizan su trabajo mediante un juego de pastillas y un disco que equivalen a la banda y al cilindro que componen los frenos de tambor.

Su funcionamiento se basa en que las pastillas, al presionar el pedal del freno, friccionan sobre ambas caras del disco para así ofrecer una energía de frenada con una eficiente disipación del calor.

  • Frenos de tambor: también denominados frenos de campana, y se componen de un cilindro que gira uniformemente junto a la rueda y dos bandas (realizadas con chapas que se recubren de forros o ferodos de freno) que son las encargadas de realizar la fricción sobre el interior del cilindro al aplicar la presión correspondiente sobre el pedal del freno.
Engrase de un freno de tambor trasero

Actualmente se siguen utilizando en el eje trasero de vehículos de bajo coste y también en vehículos comerciales, al tener un coste inferior respecto a los frenos de disco y una durabilidad mayor.

Este sistema protege con más eficacia el sistema de frenado frente a las inclemencias meteorológicas (al ser cerrado), por lo que es ideal para uso en situaciones de lluvia, nieve y caminos de baja adherencia, aunque como parte negativa disponen de una ventilación muy inferior y con un uso intenso se puede incluso producir la deformación de la campana.

Las pastillas de los frenos de disco

Las pastillas son las encargadas de generar la fricción necesaria sobre los discos de frenos para reducir velocidades del vehículo, y es necesario controlar su desgaste para así asegurar su correcto funcionamiento y evitar que las distancias de frenado se alarguen procurando una frenada lo más uniforme posible. Pueden ser de dos tipos:

  • Semimetálicas: que contienen polvo de hierro o cobre y lana de acero en una proporción entre el 30 y 60%. Son unas pastillas muy duraderas y aportan una transferencia de calor bastante eficiente, y generalmente se utilizan en vehículos de los que se generan altos rendimientos.
  • Orgánicas: que se componen de caucho, kevlar, fibra de vidrio y carbono, y funcionan en casi todas las condiciones pero no son las adecuadas para conducciones de gran exigencia ya que, aunque son de un uso más suave y silencioso, su desgaste es mucho más rápido y generan emisiones mayores de polvo de frenos.

De hecho las pastillas de freno pueden ser de materiales variados:

  • Bajas en metal: que se fabrican con composiciones similares a las pastillas orgánicas pero incorporando entre un 10 y un 30% de elementos metálicos, de manera que pueden proporcionar un frenado mejor y un mayor control de la transferencia de calor, aunque son siempre más ruidosas.
  • Cerámicas: son las más caras ya que se componen con fibras cerámicas y agentes de unión y materiales no ferrosos ni metálicos, y consiguen una mayor silenciosidad y limpieza en su uso.

Los discos de freno

Fijados al eje del vehículo son los elementos que reciben la fricción de las pastillas para producir el correspondiente frenado.

Son de mayor duración que las pastillas, aunque la no sustitución de las mismas puede provocar surcos en los discos que, sin duda, obligaran a su sustitución para evitar mayores riesgos.

En general se fabrican con fundición gris modular en grafito laminar con la matriz de carbono, siendo este último material de uso muy extendido en competición.

Los discos de freno son de diversos tipos:

  • Sólidos: los más habituales con una superficie totalmente lisa.
  • Ventilados: cuentan con curvaturas o álabes entre las dos caras para disipar el calor más eficientemente y hacer circular el aire para su ventilación.
  • Perforados: presentan una menor superficie de fricción al contar con varios agujeros que realizan la función de ventilado con mayor eficacia.
  • Rayados: incorporan rayados del material que permite una mejor limpieza de los restos acumulados entre las pastillas y los discos para así mejorar la eficacia del frenado y casi eliminar los chirridos.
  • Mixtos: en busca de las mejores cualidades de cada sistema, estos discos combinan de diversas maneras los sistemas anteriores para así incorporar todas las bondades de cada sistema.

Insistimos en que las pastillas de freno con un máximo nivel de calidad son completamente necesarias para asegurar una correcta detección del vehículo y unas prestaciones de frenada adecuadas.