Como la competencia se agudiza, Ford ha decidido aplicar una puesta al día a su buque insignia de turismo. Bastidor y suspensiones se mantienen (ya que no se trata de un modelo absolutamente nuevo), con una batalla de 2,85 m y una longitud que va desde los 4,78 m de la versión 5 puertas a los 4,85 del sedán 4 puertas, con el familiar en medio con 4,84 m, longitudes que varían un poco si se opta por el llamado “kit” de carrocería (4,80, 4,87 y 4,86 m respectivamente). El atractivo “kinetic design” tan querido por la marca se mantiene, con una toma trapezoidal frontal de aire más grande por abajo, mientras que la parrilla se hace más fina. Cambia el perfil del capó, se añade en los faros la luz de cruce diurna y las versiones mejor acabadas ganan un marco cromado para sus ventanillas laterales. Por detrás, los grupos ópticos (por diodos) han sido revisados y aumentan de tamaño.
Por dentro hay también cambios, con un nuevo diseño de la consola central del salpicadero además de una miniconsola de techo con luz ambiente por diodos (LED). Hay un nuevo diseño de asientos y tapizados, y por fuera todos los Mondeo llevan las manillas de puertas enrasadas, e igualmente todos montan llantas de 16” pulgadas de diámetro como mínimo (con versiones con llantas de 17 y hasta 18 pulgadas). El equipamiento también se ha visto mejorado con nuevos equipos de sonido (Premium Sound System) y un nuevo navegador GPS, aparte de los nuevos materiales y revestimientos de mayor calidad percibida.
Pero los cambios más importantes están bajo el capó. En la nueva familia Ecoboost de motores de gasolina, al 2.0 turbo de 203 CV ya conocido se suma ahora una versión de 240 CV, que anuncia el mismo consumo y emisiones (179 grs/km de CO2), ambos sobre el bloque de 4 cilindros y 1.999 cc y alimentados por inyección directa de gasolina. Con 30,6 y 34,7 mkg de par máximo respectivamente, estos nuevos motores Ecoboost de gasolina disponen también de un soplo puntual máximo extra del turbo, que puede elevarlo momentáneamente hasta los 32,6 y 37 mkg, uno de los mayores niveles logrados en un dos litros de gasolina de producción de serie.
Junto a ellos, se estrena como acceso a la gama gasolina un nuevo 1.6 de la misma familia Ecoboost con 160 CV y bajas emisiones (157 grs/km de CO2), del que todavía no se conocen todos sus datos técnicos. Y aunque esta versión ya tiene precio oficial (desde 25.950 euros), no estará disponible hasta el próximo mes de noviembre. También hay otros dos motores atmosféricos de inyección indirecta de 1.6 y 2.0 litros (120 y 145 CV respectivamente), que en principio no vienen a nuestro mercado.
En diesel, aunque se sigue comercializando de forma residual el antiguo 1.8 TDCi Econetic (ahora Trend) de 125 CV, entre los diesel Duratorq, el 2.2 TDCI gana ahora un 12% de potencia llegando a 200 CV, lo que le convierte en el TDCI más potente de Ford hasta la fecha. A él se añaden los 2.0 TDCI ya disponibles con 115, 140 y 163 CV, con una emisión media de CO2 de 139 grs/km, y todos sobre el bloque ya conocido de 1.997 cc y carrera larga (85 x 88 mm).
Con cambio manual de 6 velocidades (y la opción del PowerShift de origen Getrag, manual robotizado con sistema de doble embrague húmedo -en baño de aceite- para los motores intermedios 2.0 TDCI de 140 y 163 CV), estos TDCI mantienen un alto nivel de prestaciones, con velocidades máximas respectivas de 192, 210 y 220 km/h, mientras que su aceleración de 0 a 100 km/h se escalona de 11,2 a 9 segundos, siempre con un consumo combinado promedio para los tres de 5,3 lts/100 km, gracias también a que los pesos no se han incrementado y a que la aerodinámica (Cx de 0,29 en las berlinas y 0,30 en los familiares) se mantiene en un óptimo nivel.
Y lo mismo se puede decir del 2.2 TDCI ahora potenciado a 200 CV (y con hasta casi 46 mkg de par máximo con el “overboost”), cuyo consumo combinado sube a 6 lts/100 km y sus emisiones de CO2 aumentan en 20 grs/km a cambio de arrojar una aceleración en el 0-100 km/h de 8,1 segundos y una velocidad máxima (aún no homologada) de 228 km/h, lo que le sitúa entre las berlinas diesel más rápidas del mundo en su categoría. De todos modos, a nivel de prestaciones los nuevos 2.0 Ecoboost de gasolina se han convertido en los Mondeo más deportivos, sin que la disminución de cilindrada sobre el anterior bloque de 5 cilindros de origen Volvo se eche de menos. Dotados tanto la versión de 203 CV como la de 240 CV del cambio automatizado PowerShift de 6 relaciones y doble embrague, anuncian 232 y hasta 246 km/h de velocidad punta cada uno, con unas aceleraciones en el 0-100 km/h que bajan de los 8 segundos (7,9 y 7,5 respectivamente) para un idéntico consumo oficial combinado en ambos (7,7 lts/100 km, con 179 grs/km de emisión de CO2).
Cifras que se verán rebajadas en las versiones ECOnetic, que entre los nuevos dispositivos para rebajar consumos y emisiones contarán con un nuevo cierre activo de la parrilla frontal (Active Grille Shutter) con apertura variable que modifica el flujo de aire de esta toma en hasta 15 posiciones diferentes (hasta 6º de variación y hasta un 6% de mejora en la resistencia aerodinámica). Este sistema será de serie en los Mondeo 2.0 Ecoboost y en los 2.0 TDCI. Pero no son las únicas novedades de este tipo en los nuevos Mondeo. Como la mayoría de sus rivales, también incorpora los sistemas “stop & start”, así como una recarga de energía en la frenada (Smart Regenerative Charging) que permite tener cargada la batería con un menor uso del alternador, al aumentar la potencia de salida de éste durante las frenadas y retenciones. Este último sistema es de serie en toda la gama.
Además, tenemos también el aviso de cambio de carril (Lane Departure Warning), el sistema de alerta del conductor (Driver Alert) que avisa de sueño o cansancio a raíz de maniobras erráticas, el cambio automático de luces largas a cortas y viceversa (Auto High Beam), el aviso de ángulo muerto (Blind Spot Information System), limitador activo de velocidad (Speed Limiter), etc, etc. Se nota que Ford ha hecho un gran esfuerzo en el equipamiento de seguridad del nuevo Mondeo, que se equipara así al de cualquiera de los modelos “premium” del mercado en su categoría (Audi A4, BMW Serie 3 y Mercedes Clase C, sin olvidarnos al Volvo S60 que también ha subido muchos enteros).
Presentado anticipadamente este verano en el Salón de Moscú, el nuevo Ford Mondeo se vende ya desde este mes en España y aumenta considerablemente los niveles de acabado y equipamiento para el mercado europeo, con sus correspondientes precios que, dada la actual situación, apenas sí van a suponer un incremento sensible sobre la actual gama. Van desde los 24.750 euros de los 4 y 5 puertas Trend diesel a los 37.750 euros del Sportbreak Titanium S gasolina con caja PowerShift.