En realidad era ya un secreto a voces desde que se decidió en Munich que la segunda generación del SUV compacto BMW X1 compartiría la plataforma del BMW Serie 2 Active Tourer, el primer monovolumen compacto polivalente de BMW y de tracción delantera. Se trata de rentabilizar un diseño industrial pensado para Mini, pero con posibilidad de extenderse a las gamas bajas de la marca bávara. Tomará el esquema de tracción del Mini Countryman, con motores transversales delanteros y versiones 4×2, coronadas por una 4×4 para mantener la imagen “off road” del modelo. Se procurará mantener la actual imagen del BMW X1, aunque la apuesta comercial es mucho más “light” que la actual, con motores de 4 y 3 cilindros. Preparado para comercializarse al año que viene, contará con versión híbrida y motorizaciones diesel y gasolina de 3 y 4 cilindros, con una espectacular mejora de prestaciones y consumos gracias a una notable reducción de peso.
