Voy a cambiar mi Renault Clio con casi doce años y quiero un coche pequeño similar pero que sea muy cómodo, porque últimamente los coches pequeños que he conducido (algunos de alquiler) me parecen bastante duros de suspensión. He conducido Ford Fiesta, Peugeot 206 y el Clio y desde luego estos tres me parecieron más cómodos que los VW Polo, Fiat Punto y Seat Ibiza que he conducido últimamente. Hace poco conduje un Mini con ruedas de 16” y me pareció realmente “una piedra”. ¿Qué coches me aconsejan? El precio me importa pero no sería determinante y no quiero japonés ni coreano. Salvador Vázquez (Madrid)
Respuesta.– La verdad es que no hay tantas diferencias, aunque sí una tendencia hacia trenes rodantes sobredimensionados que a menudo producen ese efecto de incomodidad al rodar sobre mal piso. De hecho, los modelos más recientes suelen tener recorridos de suspensión mayores que los coches que ha tenido y que nos cita, pero los neumáticos más anchos y sobre todo de perfil bajo neutralizan este factor y convierten los coches en duros e incómodos. Los alemanes e italianos siempre han tendido a suspensiones más bien duras, mientras que los franceses han optado por compromisos donde el confort no se vea sacrificado.
Nuestro consejo en primer lugar va hacia las marcas francesas, o sea a Renault y PSA. Pruebe el actual Clio (que por otra parte está muy bien de precio en las últimas ofertas), y los Citroën C2 y C3 así como los Peugeot 207 y 206+. Pero al elegir el nivel de acabado cuide que los neumáticos no sean excesivos, en medidas que mejor no pasen de 185 de ancho (como mucho 195) y en perfil 60 ó superior, siempre en llantas de 15” ó inferior (14). A partir del perfil 50 se nota mucho ya la incomodidad de la suspensión, y montar llantas de 16” o más en utilitarios y polivalentes es un perfecto absurdo. Mucha rueda no equivale a más agarre, a menudo (sobre todo en agua) es al revés. Importa más la calidad del neumático que su medida, algo que muchos ignoran.