Prueba: Volkswagen Golf 1.0 TSI BlueMotion

25 enero, 2017
J. ROBREDO

Ahora con solo 3 cilindros

A Favor
• Prestaciones brillantes
• Calidad y funcionalidad general
• Cambio de 6 marchas
• Frenos potentes y resistentes
En contra
• Escasa altura libre al suelo
• Consumos mejorables
• Precio algo alto

A escasos dos meses de llegar a nuestro mercado los Golf renovados de esta actual 7ª generación (nacida a finales de 2012 y que será reemplazada por la 8ª en 2018), pasamos por el banco de pruebas su versión gasolina de 3 cilindros con el motor 1.0 TSI de 115 CV, cambio manual de 6 velocidades y acabado BlueMotion, ofrecido al precio de 20.260 euros.

La habitabilidad es la ya conocida del último Golf, fruto de la plataforma modular MQB del grupo Volkswagen, que le hace crecer casi 6 cm de largo (4,26 mm en total) al tiempo que adelanta el eje anterior en otros casi 4 cm, ganando 4,3 cm de batalla, que sube ya a 2,64 m (6 cm más que antes). Además, con ella se ha rebajado el peso total del coche (casi 100 kg menos de media), que en vacío arroja 1.211 kg para este 1.0 TSI BlueMotion (24 kg menos que con el 1.2 TSI), que ahora es 3 cm más bajo y casi igual de ancho (+ 1 cm), lo que se traduce en 5 cm más de anchura interior en los asientos delanteros y 3 cm más en los traseros.

Respecto a la generación anterior del Golf, no hay gran ganancia apreciable (pese a los 6 cm más de batalla) en el espacio para piernas detrás, aunque sí en su cúbico y bien organizado maletero, que sube a 380 litros (30 más que antes) con la ventaja de poder colocar la bandeja a dos niveles. En el de arriba crea un doble fondo a la vez que elimina el escalón que forma el plegado de los asientos traseros; en el de abajo se aprovecha mejor su capacidad hasta el techo. Bajo el plano va el “tyrefit” o la rueda de repuesto (opcional), pudiendo dejarse la tapa levantada para sacarla, apoyada en unos topes laterales.

Por habitáculo sigue siendo un compacto amplio, aunque ya no tanto frente a sus nuevos rivales (un Hyundai i30, por ejemplo, es más amplio), pero en todo caso cómodo para 4 adultos y ocasionalmente, también para 5 en trayectos cortos. Aunque se echa de menos algo más de anchura posterior, para admitir mejor 3 plazas traseras sin sacrificar tanto la central, muy justa y sin apenas sitio para las piernas de su eventual ocupante entre las salidas de ventilación y el túnel central.

En todo lo demás el último VW Golf sigue siendo un coche muy práctico; tiene buena visibilidad, tanto para el conductor como para los viajeros (se dominan bien las 4 esquinas), maniobra y gira mucho (sobre todo con las ruedas normales de 15”) y ofrece un interior luminoso, gracias a su baja línea de cintura. Entre los pequeños reproches, criticar el detalle de que las ventanillas traseras no bajan del todo sus cristales. Pero el climatizador es potente y funciona bien, silencioso y sin exigir reajustes frecuentes, la posición al volante es muy correcta, con holgados reglajes de asiento y volante para que encajen todo tipo de conductores, grandes y pequeños, y el freno de mano eléctrico por botón libera bastante espacio al pie de la consola, aprovechado como hueco portaobjetos (y también en el del apoyacodos central, mucho mayor que antes).

Un motor sorprendente.- Con 115 CV este motor compite de lleno con el 1.2 TSI de 4 cilindros y 105 CV, hasta ahora la opción de acceso en esta gama, y habrá que ver si a la larga llega a reemplazarlo. Con 115 CV a 5.000 rpm y 20,4 mkg de 2.000 a 3.500 rpm, presenta un par específico récord (par por cilindrada) entre los motores de gasolina, superando a modelos como el Golf GTI Performance de 230 CV junto a un consumo mínimo, el menor homologado de todos los VW Golf de gasolina, con 4,3 lts/100 km (99 grs/km de CO2), 0,6 lts menos que el 1.2 TSI 105 CV, al que también supera acelerando de 0 a 100 km/h (9,7 segundos frente a 9,9) y en velocidad máxima (204 frente a 195 km/h). Descenso de consumo logrado también por las mejoras aerodinámica de esta edición BlueMotion (Cx de 0,28 frente a 0,29 el resto de los Golf).

Al volante, este motor nos recuerda al 1.0 Ecoboost del Ford Focus, en su nivel de 125 CV, pero aún más silencioso; sin apenas las vibraciones típicas de los 3 cilindros (aunque alguna se nota en torno a las 2.000 rpm), suena poquísimo a regímenes medios y altos, y hasta con un bonito sonido a alto régimen (5.000 / 6.000 rpm), cuando se le apura en marchas cortas. Pero en baja apenas se le oye y nada delata que bajo el capó lleva un motor de 3 pistones en vez de 4. A ello ayuda también un bajo ruido de rodaje (entre las ruedas de 195, el carenado de bajos y la parrilla casi cerrada, con sólo la toma inferior de aire con lamas de apertura variable).

Desde 1.750 rpm, en que ya tenemos 18 mkg, el tirón es apreciable incluso en marchas largas, y eso que sus desarrollos tiran a largos (más de 44 km/h x 1.000 rpm en 6ª). De hecho, su 1ª es más larga (+4%) que la del 1.2 TSI, mientras que las demás repiten sus mismos desarrollos (a igualdad siempre de medida de neumático, en este caso la muy normalita de 195/65 R15, en un tipo de baja resistencia al rodaje como la Bridgestone Ecopia EP150).

Brillantes prestaciones, honestos consumos.- Volkswagen anuncia 204 km/h de velocidad punta, y a nosotros la unidad de prueba (bastante rodada) nos ha hecho los 196 en 5ª sobre las 5.200 rpm y los 190 en 6ª sobre 4.300, y eso en condiciones no muy favorables y sin demasiado lanzamiento, señal de que los 200 km/h son perfectamente reales. El 0-100 km/h lo ha cubierto en 10,3 segundos (9,7 oficiales) y el km desde parado en menos de 32 (31,6), cronos excelentes para un coche que se oferta como de bajo consumo, sin pretensiones deportivas.

Lo que más nos ha gustado es la aceleración a partir de 3.000 rpm, continua y constante, y las recuperaciones a partir de 2.000 rpm (VW afirma que cubre el 80-120 km/h en 5ª en 2 segundos menos que el 1.2 TSI), en que incluso en 6ª y con 3 plazas no requiere bajar de 6ª siempre que rodemos sobre las 2.500 rpm. Es un motor de tacto alegre que sube de vueltas como si fuera atmosférico, y reteniendo como tal, suave y silencioso y que sólo se deja oír por encima de las 4.000 rpm, y tampoco demasiado. En realidad se presta de maravilla a un coche compacto como el Golf.

En cuanto a consumos, aunque son bastante bajos, no hemos encontrado diferencia respecto a los reales del 1.2 TSI. Los 4,3 lts/100 km del promedio oficial combinado son en realidad 6 reales, con un mínimo a 90/100 km/h de 4,9 lts/100 km, que sube casi un litro (5,8) a 120/130 km/h en autovía para llegar a 6,6 en tráfico urbano. Y si se le conduce a fondo, exprimiendo toda la pólvora que lleva dentro este motorcito, rozaremos los 8 lts/100 km en carretera y los 9 en montaña. Son consumos muy buenos, pero que como pasa con el Ford Focus 1.0 Ecoboost, se podrían haber logrado igual con 4 cilindros, salvo quizá el urbano (gracias también a un “Stop & Start” que no se prodiga en exceso). Pero para su nivel de prestaciones, es un consumo sensacional, con una 6ª que permite rodar a 2.000 rpm a 90 km/h y a casi 120 km/h a 2.500 rpm, al tiempo que permite unas brillantes aceleraciones en 3ª, 4ª y 5ª a la hora de adelantar. Y ello dentro de un nivel de suavidad y silencio poco común en un tricilíndrico…

Comportamiento: el del Golf de siempre.- Y respecto a su comportamiento, nada que añadir sobre el de cualquier Golf: firme, aplomado, predecible; transmite confianza desde el primer momento, y parece como si siempre lo hubiéramos conducido. Pese a su nueva plataforma, su comportamiento es el de siempre, en curvas rápidas y en terreno virado se muestra igual de fácil y progresivo, con una suspensión algo blanda quizá para su altura libre al suelo (toca con facilidad con el mismo en los pasos de bandas transversales de frenado). Balancea un poco, pero en una sola vez, sin engañar en los apoyos al límite, y la amortiguación es especialmente eficiente a la extensión, logrando un excelente compromiso entre confort y agarre sobre mal piso.

Aparte de la excesiva rebaja al suelo (al menos para el tarado de la amortiguación) que llega a hacer que no podamos montar el voladizo delantero (porque toca) sobre el bordillo en algunos aparcamientos en batería, la asistencia eléctrica de la dirección nos ha parecido menos directa que antes, con un tacto algo más impreciso. A cambio, los frenos han mejorado, más potentes, progresivos y dosificables. Sin necesidad de ruedas “gordas”, este Golf se para en seco a 120 km/h en apenas 50 metros, algo que muy pocos coches de su segmento consiguen… Además soporta de maravilla el trato duro.

Precio algo alto.- Aunque está a la altura de lo que ofrece y en línea con el de los modelos de la marca, su precio no deja de ser algo alto para tratarse de una versión de acceso, incluso con el pack Composition Media con el Bluetooth. Sale por 20.260 euros tal cual en 5 puertas, que viene a suponer sólo un 570 € más respecto al 1.2 TSI de 4 cilindros en el nivel Edition, indicio de que quizá éste último no tarde en ser sustituido por este tricilíndrico, y del orden de 2.300 € menos que el Golf BlueMotion diesel más asequible (el 1.6 TDI de 110 CV). Pero si nos fijamos en sus rivales de Ford (el Focus 1.0 Ecoboost) y Opel (Astra 1.0 Turbo) lo cierto es que se mueve entre 2.000 y 4.000 euros por encima, que es mucho… Y eso sin entrar en diferencias de equipamiento (que aunque se han recortado, subsisten), y con precios de opciones más ajustados.

En todo caso, este nivel BlueMotion incluye llantas de aleación ligera (de 15” con neumáticos de 195/65 R15 con control de presión), cuadro multifunción con Eco-HMI (con indicaciones para un consumo eficiente), asistente de arranque en cuesta, diferencial con bloqueo electrónico XDS, freno anticolisiones múltiples, climatizador, retrovisores exteriores eléctricos, dirección asistida electromecánica, sistema Stop&Start con función de recuperación de energía de frenado, etc. Todo dentro del equipamiento de serie de este nivel BlueMotion que incluye sin sobrecoste el paquete Edition, que también puede incluir en opción el control de velocidad de crucero, el sistema” pre-crash” o los sistemas de información y entretenimiento. Y en cuanto a conectividad, tenemos los servicios del Volkswagen Car-Net, con su ‘App-Connect’ que reúne los sistemas Mirror Link, Android Auto y Apple CarPlay, con la posibilidad de utilizar prácticamente todo tipo de aplicaciones para “smartphones”.

Versiones del modelo: 'Golf'

Galeria de fotos

Volkswagen
Volkswagen

Tno. 93 402 89 67
Garantía: 2 años sin límit