Una manera de vivir
Presentado en diciembre del año pasado en EE.UU., su llegada a Europa se espera a comienzos de 2015. La sexta generación Mustang llega al mercado europeo en versiones coupé y cabrio con dos motores de 310 y 435 CV bajo una lograda estampa algo menos “retro” que el anterior pero respetando los rasgos originales de los Mustang de los 60. Un coche que define una manera de vivir.
El nuevo Mustang ofrece una estampa muy lograda, bajo el clásico diseño de coupé 4 plazas de los Mustang “fastback” con la caída de techo de los primeros Shelby. El frontal es todo un acierto, con sus faros rasgados y fuera de la parrilla, como nota actual, pero esta última mantiene un diseño similar al original que le identifica como miembro de la saga. Mide 4,78 m de largo, casi lo mismo que el Mustang del 67 y su imagen recuerda la del Mustang de siempre (los I y II, y luego el V), lejos de la de los más anodinos Mustang III y IV. Todo un icono del coche deportivo americano de los 60, pero con la tecnología del siglo XXI.
Frenos más robustos.– Como es de ley sigue siendo un tracción trasera, pero ahora con suspensiones independientes y un mejor reparto de pesos junto a un eje multibrazo más sofisticado, con manguetas y tirantes de aluminio mientras que el eje delantero estrena nuevas torretas Mac Pherson con anclaje de doble rótula, lo que permite montar grandes discos de freno (nada menos que de hasta 380 mm de diámetro) sin tener que recurrir a un excesivo descentrado de ruedas, que siempre afectaría al tacto de la dirección.
Lógicamente ello le obliga a montar grandes llantas, de 19” de serie, con discos delanteros ventilados de 352 mm para el 2.3 Ecoboost de 310 CV o de 380 para el V8 5.0, con pinzas de 4 y 6 pistones en cada caso. Un remedio radical para terminar con una de las críticas más comunes a este coche, como eran sus frenos un tanto escasos, más por culpa de su peso (1,7 toneladas) y prestaciones que por otra cosa. El peso también ha sido aligerado, hasta la tonelada y media en el 2.3 Ecoboost y rozando los 1.600 kg en el V8 (aunque en el cabriolet llega a los 1.650 kg).
Pero sin duda, son los nuevos faros carenados (con luz de cruce diurna por diodos integrada) el rasgo distintivo de esta última generación Mustang, que mantiene detrás los grupos ópticos cuadrados con triples barras verticales, mientras que baja un poco la tapa del maletero (de nuevo otro guiño al primer Mustang) que pese a ello es algo mayor (unos 380 litros, que bajan a 325 en el cabrio), con un volumen ya aceptable para un coupé deportivo, aunque mida casi 4,8 m de largo.
La habitabilidad mejora un poco, aunque su cintura alta y la caída del techo no ayudan mucho a ello, y menos a la visibilidad, con las lunas triangulares posteriores de custodia reducidas a la mínima expresión. Pero lo que cuenta es que su estampa es realmente dinámica y deportiva, recordando al Mustang clásico pero bajo la óptica de un coche actual pensado con vocación mundial (global, como dicen en Ford) y sobre todo para gustar tanto en Europa como en América.
Motor Ecoboost.– En cuanto a la mecánica, tenía también que adaptarse a los gustos y tendencias del viejo continente, y eso es lo que ha hecho Ford con el motor 4 cilindros turbo, el 2.3 Ecoboost diseñado específicamente para el nuevo Ford Mustang (con inyección directa, distribución variable y turbo),que con sus 310 CV y 41,5 mkg de par da más potencia y par que el anterior V6 4.0 e incluso que el V8 4.6. Por eso para Europa no viene el V6 3.7 (que sí se ofrece en EE.UU.) y sólo este 2.3 Ecoboost, junto al V8 5.0 atmosférico (4.951 cc) de 435 CV (54 mkg de par) para los nostálgicos del ronco rugido de estos motores… y capaces de soportar su consumo.
En todo caso, las ventas del V8 5.0 serán aquí meramente testimoniales, aunque si más adelante llega la versión Cobra de este motor, ya con inyección directa y menos consumo, y con una potencia en torno a los 500 CV, ya podrían tener más interés para los amantes de los “muscles cars”. Ambos motores vienen con cambio manual de 6 relaciones (o automático igualmente de 6 y uso secuencial por levas al volante), ofrecidos de modo inverso, el 2.3 Ecoboost con caja manual de serie y automática opcional, y el V8 5.0 al revés, con el cambio automático de serie y el manual en opción, montando los dos de serie el diferencial autoblocante electrónico posterior con control vectorial de par.
El Mustang Convertible.– En cuanto al cabriolet, llegará aquí al mismo tiempo que el coupé, como un descapotable más bien de 4 plazas que 2+2, con una habitabilidad muy mejorada respecto al anterior, aunque gane poco en maletero (324 litros), también por culpa de los refuerzos aplicados para compensar la ausencia de techo rígido, que elevan el peso total en 60 kg, a cambio de un 13% más de rigidez torsional. En EE.UU. ya se vende con los motores V6 3.7 y los V8 de 4.2 a 5 litros de cubicaje, aunque para Europa vendrá también el 2.3 turbo Ecoboost.
El techo de lona ha sido especialmente tratado y lleva una capa interior aislante de 1 cm de grueso, pese a lo cual se ha logrado un plegado en Z muy compacto, lo que ha hecho que plegado su altura total en su compartimento sea casi 20 cm menor que antes. Igualmente el mecanismo de apertura y cierre eléctrico es ahora mucho más rápido que antes (sólo 7 segundos en el despliegue, el más rápido del mercado) gracias a un nuevo sistema puramente eléctrico en vez de electrohidráulico, más ligero y compacto.
Con todo el equipamiento electrónico disponible en los Ford de gama alta (sistema SYNC de conectividad con pantalla táctil y mando por voz, navegador, ESP, “launch control”, etc.), el nuevo Mustang VI para Europa se presentará antes de que termine el año. Ford ha previsto un total de 9.300 unidades para su venta en Europa, de las que 1.061 lo serán para España, y ya se ha encargado de calentar el ambiente con una edición especial limitada 50 aniversario, de la que sólo se producirán 1.964 unidades (el año de su nacimiento) ofrecido en dos colores (blanco y azul, como los del primer Mustang) y con tapicería especial en cuero y cachemira, biseles cromados, etc.
Y como promoción especial para que los más impacientes no tengan que esperar al año que viene (y como despedida de su patrocinio futbolístico de la Champions League), Ford ha realizado una espectacular acción en la que las primeras 500 unidades europeas del Mustang pudieron reservarse por Internet durante la hora y media del partido de la final de la Champions (el que ganó en Lisboa el Real Madrid al Atlético de Madrid), en sus dos motores y carrocerías y en dos colores: Rojo Race y Plata Magnetic.