¿Derrapando con un tracción quattro?
El Audi RS 3 prototype es el primer modelo que incluye el nuevo dispositivo Audi RS torque splitter, un sistema de vectorización activa del par que mejora la estabilidad al repartir el par en el eje trasero de forma variable y permite un modo «drift».
Las primeras imágenes oficiales del futuro Audi RS 3 han sido desveladas por la propia marca, aunque convenientemente camufladas sobre dos versiones RS 3 prototype, una con carrocería Sedán y otra Sportback. Pero más allá de vislumbrar algunos detalles de sus carrocerías, con sus enormes parrillas, llantas de perfil ultrabajo, dos enormes salidas de escape ovaladas y la confirmación de que seguirá contando con «la joya de la corona» (su mítico propulsor de 5 cilindros y 2.5 litros con 400 CV), la novedad radica en que emplearán el nuevo sistema Audi RS torque splitter. Desarrollado por los ingenieros de Ingolstadt, este sistema añade un embrague multidisco con control electrónico en cada uno de los ejes en sustitución del diferencial del eje trasero y el anterior embrague multidisco.
Funciona sobre la rueda trasera interior, que es la que más presión soporta, por lo que se reduce el subviraje en curvas a alta velocidad y continúa el ángulo marcado por la dirección con mayor precisión. Cada embrague cuenta con una unidad de control que obtiene información de los sensores de la velocidad y actúa en consecuencia.
Además, se emplea un controlador modular de la dinámica del vehículo (mVDC), sincronizando las dos unidades de control del torque splitter, los amortiguadores adaptativos y el control de par selectivo de las ruedas. Con todo este sistema se puede variar el comportamiento del vehículo en función del modo seleccionado, variando el reparto de par en función del modo de conducción del Audi drive select. Se han creado 5 modos para el Audi RS torque splitter en conjunto con el Audi drive select:
- El modo confort/efficiency da prioridad al eje delantero, aunque reparte par entre las cuatro ruedas.
- El modo auto distribuye el par de forma equilibrada entre ambos ejes, y entre cada una de las ruedas de cada eje.
- El modo dynamic se centra en el eje trasero, con el fin de garantizar un dinamismo superior.
El modo RS Torque Rear lleva este dinamismo al extremo, permitiendo los derrapes controlados, mandando el par al eje trasero, con hasta un 100% de par enviado a la rueda exterior trasera. Este modo está pensado para carreteras cerradas o circuito, no para un uso en la vía pública.
También se ha cambiado la configuración del motor y la trasmisión, que junto con el modo RS Performance ofrece una experiencia sobresaliente en circuito. A este efecto también se han montado unos neumáticos semi-slick Pirelli P Zero Trofeo R de alto rendimiento, reduciendo el subviraje y el sobreviraje al mínimo posible.
Todavía tendremos que esperar un poco más hasta que podamos ver las líneas definitivas de la nueva generación del Audi RS 3, ya con año de modelo 2022.