VW Golf “VII”: tres llamadas en dos años

2 abril, 2015
GONZALO NAVARRO

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La última generación del Golf (septiembre 2012) sigue honrando su buena fama de coche con pocos problemas, pero aun así ha sufrido en dos años pequeños contratiempos mecánicos (pérdidas de gasóleo por la bomba de inyección o el conducto de rampa común en los TDI, algún fallo en la válvula de presión del turbo, disfunciones en la desconexión parcial de cilindros en los 1.4 TSI 140 CV…). Más relevancia tuvo el relativo a los cambios DSG, a los que hubo que cambiar su aceite sintético (corrosivo) por otro mineral, así como las disfunciones del diferencial electrónico LSD en los GTI y el del freno de mano eléctrico (por tecla), con sus fallos frecuentes al ponerlo y soltarlo. Pero como llamadas oficiales a revisión ha sufrido tres: dos en marzo de 2013 y otra en julio del año pasado. Las primeras se debieron al posible fallo del airbag del acompañante delantero, que obligó a reemplazarlo en las unidades de preserie producidas de enero a febrero de 2012, y al fallo electrónico (con desactivación incluida) de los sistemas de ESP y ASR, así como del sensor de presión de neumáticos y de bloqueo del diferencial, sufrido en las primeras serie (1VE4-95 y 1VE4-98) de los Golf 4Motion. Finalmente, en julio de 2014 hubo una tercera llamada para las unidades fabricadas del 27 de enero al 12 de mayo del pasado año para revisar y cambiar en su caso la barra estabilizadora delantera (por flexión excesiva causante de ruidos y en caso extremo, bloqueo de la dirección).