«Coche del Año 2017»: Renault Megane

7 febrero, 2017
M.M.

Un compacto lleno de talento

No se puede negar que Renault ha echado el resto y más en esta cuarta generación de su berlina media Megane en carrocería 5 puertas, un coche con vocación de triunfador, fabricado en España (Palencia) con una importante ganancia en calidad y tecnología. Tradicional líder de ventas en nuestro país, completa su oferta con la versión familiar Sport Tourer, alzándose indiscutiblemente con nuestro premio al mejor Coche del Año del recién estrenado 2017. Diseño, confort, funcionalidad, versatilidad, prestaciones y una gama muy completa y bien equipado tecnológicamente, junto a una seguridad activa y pasiva de primer nivel, han sido armas suficientes para imponerse en esta 44 edición de nuestro premio. Un coche convincente y con muy buena relación precio/equipamiento, del que aquí se encuentra su justificación.

La cuarta generación de Renault Megane no se trata sólo de un compacto medio más apto para todo, sino de una avanzada berlina 5 puertas ideal tanto para “singles”, parejas o familias jóvenes, con una calidad percibida de alto nivel y economía sin olvidar la vocación familiar y deportiva que representa la carrocería Sport Tourer. Viene a ser ante todo una síntesis de la berlina europea del segmento C por antonomasia y un turismo deportivo de dimensiones compactas con un comportamiento dinámico para agradar a la mayoría y un gran confort y suavidad de marcha.

Fabricado en exclusiva para Europa en la planta Renault de Palencia, el objetivo de este Megane IV es mantenerse en el podio de los tres compactos más vendidos de Europa, una meta a su alcance dado su historial de triunfos. Al fin y al cabo, tras más de 20 años desde su primera generación, se han vendido 6,6 millones de unidades a nivel internacional y ha sido líder de ventas en España en 12 ocasiones, de ellas 9 consecutivas.

Diseño muy atractivo.- Esta cuarta generación adopta la nueva variante de la plataforma modular CMF, con carrocería de 5 puertas y 2,67 m de batalla (3 cm más que antes) y una ingeniería que alcanza el mayor nivel de calidad industrial jamás antes logrado en esta gama. Casi 6,5 cm más largo (4,36 m) y más ancho de carrocería (1,81m) y vías (1,59 m, ha disminuido sin embargo su altura en 2,5 cm (hasta 1,45 m), repercutiendo el aumento de batalla en una mayor habitabilidad interior (+ 2 cm en el espacio para piernas de las plazas traseras, con 1,40 m de ancho en la 2ª fila a nivel de hombros y 1,44 m delante) y capacidad de maletero (434 litros brutos que se quedan en 384 VDA, 12 más sobre los 372 del anterior Megane).

Siempre hablando de la berlina, porque quienes busquen más espacio útil, ya disponen desde septiembre de la versión familiar Sport Tourer, con un deportivo diseño a caballo entre un “break” clásico y un “break de chasse”. Es casi 7 cm más largo que su predecesor, y se distingue por su elegante diseño que combina una personalidad de carácter deportivo con un alto nivel de modularidad y un maletero que aprovecha la mayor longitud total para anunciar un volumen con 5 plazas de 580 litros brutos (521 VDA) bien distribuido en un amplio espacio de carga fácilmente, con la mayor anchura de su segmento.

Y todo ello logrado sin ganar peso (por el contrario, el uso de acero de alta resistencia ha permitido disminuirlo ligeramente) y con un moderado aumento de dimensiones, que le sitúa ya entre los coches más largos y más habitable de su segmento. Su frontal presenta un diseño en línea con el del Clio y el nuevo Talismán, con el rombo central de gran tamaño en medio de una parrilla que se prolonga por abajo y por los lados hasta llegar a los faros. Su firma visual de luz es también nueva, con luz de cruce diurna por diodos en forma de “C” (como en el Talismán) y en 3D en la parte delantera, y también detrás prolongadas horizontalmente en los paragolpes, cubriendo de lado a lado el vehículo de forma transversal, aumentando su sensación de anchura.
La berlina sólo viene en carrocería 5 puertas y dos volúmenes (no habrá Sedan 4 puertas), y además tenemos también la variante familiar Sport Tourer.

Y es precisamente éste último, ya a la venta en nuestro mercado, el que va a talonar la oferta del Megane berlina de forma muy significativa, con ese volumen ampliado de carga (que supone 90 litros más sobre el 5p y 40 más sobre el anterior Megane Sport Tourer). Con una batalla algo mayor (2,71 m por 2,67 la berlina) aprovecha el aumento de batalla tanto para una mayor habitabilidad de sus pasajeros (2 cm más de espacio para las rodillas en las plazas traseras) como para ganar volumen de maletero. Éste cuenta además en el piso con anillas y red de sujeción de carga, y su cortina cubreequipajes se puede guardar en un hueco específico bajo el piso del maletero si no se usa. Además, el respaldo del asiento del acompañante delantero puede abatirse para transportar objetos de hasta 2,77 m de largo, longitud récord entre los familiares de su segmento.

Equipamiento muy completo.- Otro punto fuerte de la oferta Megane, decisivo en su elección como nuestro premio Coche del Año 2017, es su amplia variedad de niveles de equipamiento; a los tres niveles últimamente habituales de la marca, el básico Life, el medio Intens y el alto Zen, se unen otros específicos, uno para los amantes del buen sonido (Bose), otro deportivo GT exclusivo de las dos versiones más potentes (y ampliado a las demás como GT-Line), y otro más para flotas (Business) sólo con el motor 1.5 dCi (90 y 110 CV).

En el nivel GT cambian algunos rasgos exteriores (paragolpes delantero diferente, con una mayor toma de aire y sin antinieblas, parrilla en nido de abeja, zaga con dobles salidas de escape a juego con las hendiduras delanteras, integradas en un difusor de efecto suelo, con el logo “Renault Sport“ en la trasera, aletas y frontal). Estos acabados se extienden igualmente al Megane Sport Tourer, que repite el mismo frontal de la berlina y su luz de cruce diurna en forma de C, mientras que añade barras de techo integradas, (en aluminio mate en la versión GT).

Porque Renault también distingue en esta oferta familiar del Megane entre el Sport Tourer y el Sport Tourer GT, con las mismas diferencias de la berlina (deflector trasero, salidas cromadas de escape, parrilla frontal en nido de abeja, paragolpes, etc) y también en su interior (pedalier deportivo en aluminio, tapicería de cuero perforado, volante específico y más deportivo…) y ofrecido sólo con los dos motores más potentes: el TCe 205 CV, en gasolina con el 1.6 turbo ya conocido en la berlina, y el dCi 165 CV diesel, a partir del 1.6 dCi biturbo, ambos como en la berlina con el cambio EDC de doble embrague (con 7 marchas en el TCe 205 y 6 en el dCi 165 diesel), así como la dirección activa a las 4 ruedas (4 Control), como la que ya ofreció Renault en el Laguna GT.

Precisamente esta dirección activa a las 4 ruedas, con las dos traseras también directrices, ha sido también otro factor (el de la tecnología) que ha contribuido a la victoria del nuevo Renault Megane, como novedad técnica en su segmento. Renault la llama “chasis 4Control”, diseñado para aumentar la agilidad y estabilidad de trayectoria de este Megane GT. Con el 4Control las ruedas traseras giran en el mismo sentido de las delanteras a más de 80 km/h (hasta un máximo de 1º) y por debajo de 60 km/h lo hacen en el sentido contrario (hasta 2,7º). Su efecto en curva es inmediato, haciendo que el coche gire más con menos movimiento de volante.

Pero sin llegar a este alarde exclusivo de los Megane GT, el equipamiento de seguridad y confort de esta cuarta generación Megane es muy completo. Desde el nivel de acceso Life trae de serie 6 airbags, 4 alzacristales eléctricos y por supuesto el ya obligatorio ESP más el testigo de presión de neumáticos, con elementos tales como la ayuda al arranque en cuesta, aire acondicionado (manual), programador de velocidad, retrovisores con ajuste eléctrico y radio con USB y Bluetooth. En el siguiente nivel Intens las llantas son ya de aleación y 16” con los neumáticos 205/55, lleva regulación en altura y profundidad del volante, faros antiniebla y sensores traseros de aparcamiento (ver cuadro de equipamiento), todo por mil euros más.

Y luego el nivel Zen trae ya climatizador dual, cambio automático de luces (cruce/carretera) y otras ayudas a la conducción, sensores de lluvia y luz, una tapicería más exclusiva, y el equipo de conectividad R-Link2 con navegador y pantalla de 7” (la de 8,7” es opcional o para la versión Bose). Y el nivel intermedio Business (reservado a flotas y empresas), añade por 500 euros más sobre el Intens el climatizador dual, los sensores de lluvia y luz y una rueda de repuesto normal.

Por último, como en los Espace y Talismán, los niveles altos de acabado (Zen, GT y GT-Line y Bose) disponen de la función Multi-Sense para elegir modos de conducción, variando la respuesta del acelerador, motor, dirección, cambio de marchas automático (si lo lleva), aparte de modificar otros detalles (la función masaje de los asientos, el color de la luz ambiental del interior, etc). La función Multi-Sense ofrece hasta 5 modos distintos de conducción: Sport, Normal, Confort, Eco (y RS en el Megane GT) más un programa adicional para ajustar al gusto del conductor cada elemento.

La oferta mecánica.- Todos los motores (Tce y dCi) del nuevo Megane son de 4 cilindros, alimentados por inyección directa y turbocompresor, cumplen la normativa de emisiones Euro 6 y montan de serie el dispositivo de arranque y parada automática del motor (“Stop & Start”). Además, el Megane GT TCe 205 estrena un color Azul Rayo exclusivo, con detalles metalizados (“Dark Metal”) delante y en las carcasas de los retrovisores, así como nuevas llantas de aluminio de 17 pulgadas desarrolladas específicamente por Renault Sport (y de 18” en opción).

De los 6 motores posibles, hay tres de gasolina TCe y tres diesel dCi. Los tres TCe llevan bloque de aleación ligera con distribución por cadena, cubicando los dos primeros –TCe 100 y TCe 130– 1.197 cc y 1.618 cc el tercero (el TCe 205 del GT). La versión 100 de estos TCe 1.2 da 100 CV a 4.500 rpm, con un par máximo de 17,8 mkg desde sólo 1.500 rpm, regímenes muy bajos que le permiten ofrecer una elasticidad al nivel de la del dCi 90, acelerando en 12,3 segundos de 0 a 100 km/h con una velocidad punta de 179 km/h (y 5,4 lts/100 km de consumo oficial mixto). La versión 130 de este mismo motor da 130 CV a 5.500 rpm, con un par máximo de 20,9 mkg, que le permiten cubrir el 0-100 km/h en 10,6 segundos y alcanzar los 197 km/h de velocidad máxima, con una décima menos de litro (5,3) en su promedio oficial de consumo (119 grs/km de CO2).

En diesel, la familia dCi parte del conocido bloque 1.5 de fundición y 1.461 cc con culata de 8 válvulas y distribución por correa, en sus dos variantes (90 y 110 CV). El primero da 22,4 mkg de par máximo y el segundo 26,5, ambos a 1.750 rpm (lo mismo que los dos dan su potencia máxima a 4.000 rpm). El dCi 90 anuncia 174 km/h de velocidad máxima y 13,4 segundos en el 0-100 km/h, mientras que el dCi 110 mejora ambos registros hasta los 187 km/h y 11,3 segundos, anunciando los dos el mismo consumo oficial combinado (3,7 lts/100 km).

Lo mismo que los TCe 100 y 130, montan cambio manual de 6 relaciones, pero con la posibilidad en el dCi 110 de montar el cambio EDC automatizado de doble embrague (también de 6) con el mismo consumo y velocidad máxima que el manual y un segundo más (12,3) en el 0-100 km/h. Y la oferta diesel se completa con el dCi 130 como alto de gama (dejando aparte la versión de 165 CV exclusiva del dCi GT 165), que con sus 130 CV a 4.000 rpm y 32,6 mkg desde 1.750 rpm representa el mejor nivel de prestaciones de la gama normal, incluso algo superior al TCe 130. Este 1.6 es una de las mejores mecánicas diesel en su cilindrada a nivel mundial, con los 1.598 cc de sus 4 cilindros de cotas cuadradas (80 x 79,5 mm) bien exprimidos mediante una sofisticada inyección multiorificio, junto a una distribución de 4 válvulas por cilindro movida por cadena. Con inyección directa “common rail” de 3ª generación y un solo turbo (la versión de 165 CV es biturbo), logra un consumo combinado de 4 lts/100 km para su brillante nivel de prestaciones (198 km/h de velocidad punta y 10 segundos en el 0-100 km/h).

Aparte quedan los dos Megane más deportivos, los GT. Mientras llega el dCi 165, previsto ya en el primer trimestre de 2017, tenemos al TCe 205 EDC como máximo exponente GT, con sus 205 CV a 6.000 rpm, sin que su par máximo (28,5 mkg a 2.400 rpm) lo entregue a muchas vueltas, garantía de una respuesta contundente a cualquier régimen. Con el cambio EDC de 7 marchas que monta de serie anuncia 230 km/h de velocidad punta y 7,1 segundos para cubrir el 0-100 km/h, con un consumo mixto oficial de 6 lts/100 km (134 grs/km de CO2). Su cambio EDC 7 cuenta de serie con función Launch Control (máxima aceleración desde parado) y Multi Change Down (para reducir varias marchas de una sola vez), además de las 4 ruedas directrices del chasis 4Control.

En cuanto a frenos, los Megane GT montan los mayores discos de freno de toda la gama (de 320 mm autoventilados los delanteros por 290 mm macizos los traseros), frente a la monta estándar de discos ventilados delanteros de 280 mm y macizos traseros de 260 mm (salvo en los TCe 100 y dCi 90, que reducen el diámetro de los delanteros a 269 mm).

Amplia oferta de ayudas a la conducción.- Sin duda de las más completas de su clase, al nivel de las del Renault Talismán, desde la alerta de ángulo muerto a la lectura de señales de tráfico con límites de velocidad, aviso por cambio involuntario de carril, control de crucero inteligente, frenada de emergencia asistida, asistente de aparcamiento semiautomático, programador de velocidad activo…

Al volante destaca también la posibilidad de contar con lectura del cuadro en un “head up display” a color (sobre una lámina de plástico sobre el salpicadero), un cuadro que además es configurable a voluntad (a partir de los niveles Zen y GT-Line), y trae en el Bose cámara de visión trasera, faros de diodos y el equipo de sonido que le da nombre.
Y ya para finalizar, mencionar la versión superdeportiva RS (que ofrecerá la berlina en este mismo año) y la versión híbrida diesel (Hybrid Assist) a partir del dCi 110, de la que Renault anticipa ya un consumo de 3 lts/100 km (menos de 80 grs/km de CO2), bajo una microhibridación simple a 48V que además de recuperar energía en fases de retención y frenado, suministrará un plus de aceleración a bajo régimen. Ambas versiones complementarán la ya de por sí muy atractiva oferta de este nuevo Renault Megane. Tan atractiva como para haberse hecho acreedor a nuestro premio como mejor COCHE DEL AÑO 2017.

Versiones del modelo: 'Megane'

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