Prueba: Renault Kadjar 1.5 dCi Zen

14 abril, 2016
J. ROBREDO

Todo camino, todo tiempo, todo uso

 

A Favor
• Funcional y habitable
• Bajos consumos
• Buen comportamiento
• Maletero generoso
• Precio competitivo
En contra
• Desarrollos largos
• Acabado mejorable
• Banqueta trasera no desplazable

Apto para todo y para todos probamos a fondo el todocamino Kadjar, económico de consumo y con el cambio manual de 6 relaciones sobre el experimentado motor 1.5 dCi de 110 CV, en el acabado máximo Zen y a un precio oficial (con descuento) de 25.500 euros.

“Made in Spain”, simpático y robusto, este Kadjar nace como hermano aventajado del Captur, sobre la misma plataforma modular del último Nissan Qashqai (la CMF, también utilizada en el último Espace), pero con una carrocería algo más larga que la de su primo nipón (+7 cm) y un poquito más ancha y alta (4,45 m de largo por 1,84 de ancho y 1,61 de alto). Su estampa repite la estética del Captur, pero con distintos laterales y zaga.

Buena habitabilidad.- Lo hemos probado en el nivel Zen, el más alto de acabado, pero con un motor muy normalito, el turbodiesel 1.5 dCi (110 CV) y tracción delantera (4×2), suficiente en un moderado uso todo camino (dada su generosa altura al suelo, 20 cm). Quien desee salir más por tierra debe considerar la compra del nivel Xmod, con tracción igualmente delantera pero mejorada con la ayuda del Extended Grip, un autoblocante electrónico que suple en la mayoría de los casos a la auténtica tracción total.

Pero tal y como está, el Kadjar es una opción para quien busque un SUV compacto, cómodo y amplio, y muy adecuado para el uso diario que refuerza su imagen todo camino con sus grandes ruedas (de 17” de serie en este nivel Zen, y 18 y hasta 19” en opción) y una mayor altura libre al suelo… Las barras de techo (de aluminio) van casi incrustadas en el mismo (sólo sirven si se instalan los correspondientes travesaños) y los escudos anterior y posterior configuran una protección de bajos muy propia de un SUV.

31 Renault Kadjar 1.5 dCi 110 CV Zen interior asientos delanteros 500

La habitabilidad es un poco mejor que la del Nissan Qashqai, con el que comparte la misma plataforma de 2,65 m de batalla. Los pasajeros traseros disfrutan de un considerable espacio para piernas, dentro de unas medidas de banqueta (plegable por mitades asimétricas 60/40) muy aceptables, con 1,38 m de ancho útil a nivel de hombros, lo que permite acoger tres adultos sin apuros en viajes cortos y medios. Dispone además de una toma de corriente a 12V, spots de lectura y tres anclajes Isofix para sillas infantiles sobre esta banqueta, aunque no es fácil aprovecharlos a la vez (si se instalan dos sillitas en los extremos, el central es muy difícil de colocar, al menos en los puntos Isofix –pero no en los del cinturón–).

En todo caso, por anchura no hay problema, sin que el túnel central de la transmisión (que sobresale sólo unos centímetros) estorbe demasiado. Lo peor es que no tenga ajuste longitudinal, algo que se echa mucho de menos en la versatilidad de estos coches. La funcionalidad se aprecia en los huecos portaobjetos (hasta 30 litros extra) repartidos por todo el habitáculo, que completan un generoso maletero de 472 litros VDA (más de 500 brutos, y 33 más de los que tiene el Qashqai), ampliables en caso de necesidad hasta casi 1.500 litros abatiendo los asientos traseros. Su umbral de carga queda un poco alto (79 cm del suelo).

Este maletero es un punto fuerte del Kadjar, práctico y racional no suprime la rueda de repuesto (de emergencia) salvo que se monte el equipo hi-fi especial Bose (caso de nuestra unidad de prueba), perfectamente prescindible. Bajo el piso hay un hueco de escasa altura (7 cm) cubierto por una bandeja que hace de doble fondo (de más de un metro de ancho por 69 cm de fondo) que sirve para pequeños objetos. A los lados, tenemos dos ganchos portabolsas y un punto de luz al lado izquierdo. Los 7 cm de longitud extra del voladizo posterior se han aprovechado bien, con casi 500 litros reales, contando el hueco bajo el piso de carga bajo el que se podría alojar una rueda de repuesto incluso normal (está disponible en otros mercados), aunque en ese caso se anula el hueco bajo el piso.

11 Renault Kadjar 1.5 dCi 110 CV Zen interior salpicadero 500

Una vez dentro, el diseño del salpicadero está muy logrado, con una disposición de mandos intuitiva y al alcance de la mano, aunque alguno quede algo oculto (como el del control de estabilidad ESC, a la izquierda del volante). El cuadro lleva velocímetro digital y cuentavueltas analógico alrededor, y los indicadores secundarios (combustible y temperatura) traen su señalización por barras, un tanto imprecisa y además se añaden indicadores de potencia y par instantáneo que pueden ayudar al conductor de manera puntual.

La consola gana mucho con la pantalla multimedia R-Link 2.0, de conectividad ampliada y más visible que antes (es como la del nuevo Espace). Trae también reconocimiento de voz, y con el R-Link se incluye un año de acceso gratuito a TomTom Traffic (la información del tráfico en tiempo real del navegador TomTom), así como varias actualizaciones de cartografía europea y acceso al R-Link Store para descargar múltiples aplicaciones (tanto gratuitas como de pago).

El volante multifunción de tres brazos reparte sus mandos en los horizontales, mientras que la palanca de cambio se ubica ligeramente por encima de la base de la consola, con la tecla del freno de mano eléctrico detrás de ella. Y todo resulta muy accesible y manejable. Los asientos delanteros son cómodos y envolventes, aunque pecan de algo blandos de banqueta, gozando de una notable altura libre al techo, incluso con el panorámico opcional de vidrio, que no es practicable y cuyo marco reduce la altura disponible. Aún así, pasajeros de más de 1,80 m de estatura viajan cómodamente en la banqueta trasera sin que sus cabezas lleguen a rozarlo. Este techo fijo de vidrio de gran superficie (1,4 m2) ocupa toda la zona superior del mismo, y aparte de ir tintado lleva una cortinilla por mando eléctrico para reducir la excesiva radiación solar en verano. Mejora la calidad percibida, con revestimientos plásticos de buen tacto en la zona superior del salpicadero y puertas, pero peores y más rígidos en el resto.

32 Renault Kadjar 1.5 dCi 110 CV Zen interior asientos traseros 500

En cuanto a las plazas traseras podrían haberse cuidado algo más: sus ocupantes tienen una toma de corriente a 12V y spots de lectura, pero carecen de aireadores propios y los apoyacabezas de estas plazas son bajos para las grandes tallas, y no se pueden subir mucho porque se salen de sus guías (sólo tienen un punto de ajuste), además de quitar visibilidad. Si se pliegan los asientos, el maletero no presenta un suelo perfectamente plano (aunque lo sea bastante). Pero sin duda, la mayor crítica es la ausencia de reglaje longitudinal de la banqueta trasera.

Mecánica sobria y solvente.- Aunque pueda parecer algo escaso, el muy experimentado turbodiesel 1.5 dCi con culata de 8 válvulas y 110 CV (un motor “made in Valladolid”), resulta suficiente y eficiente para este tipo de coche, no excesivamente pesado (al filo de la tonelada y media). Quienes busquen más prestaciones en diesel siempre tienen la opción del 1.6 dCi de 131 CV. Dotado con pistones antifricción y aceite de baja viscosidad, da ahora 26,5 mkg desde 1.750 rpm y ha homologado en el Kadjar un consumo combinado de sólo 3,8 lts/100 km, y eso con unas prestaciones nada desdeñables (182 km/h de velocidad punta y 11,9 segundos en el 0-100 km/h, que son 11,7 con el cambio automático EDC, cubriendo el km desde parado en poco más de 33 segundos). Cumple las especificaciones Euro 6 y viene se serie con el sistema “stop & start”.

Nuestra unidad de prueba, de cambio manual y ya bastante rodada, mostró al volante casi el mismo nivel de agilidad del Captur de igual motor probado antes, aunque lógicamente por debajo de él (pesa más, y sobre todo, lleva desarrollos más largos). El 0-100 km/h lo ha cubierto en 12,3 segundos, 4 décimas más sobre el crono oficial, y el km desde parado en casi 34 (33,8), que aún son cronos muy aceptables para un coche de 1.455 kg en vacío, y un desarrollo en 5ª de casi 47 km/h x 1.000 rpm y de más de 54 en 6ª… A cambio, la velocidad punta (lograda en 5ª) ha sido de 177 km/h, gracias a ese largo desarrollo en 5ª que le permite alcanzarla casi (3.800 rpm) al régimen de potencia máxima… No son prestaciones deportivas desde luego, pero suficientes para un coche como éste con pretensiones ante todo prácticas y funcionales.

05 Renault Kadjar 1.5 dCi 110 CV Zen 500

De giro suave y menos ruidoso que en el Captur (se nota su mejor insonorización), este motor se mueve muy bien entre las 1.800/2.000 rpm hasta las 3.500, permitiendo ritmos legales muy holgados en autovía. Por encima de los 140 km/h en 6ª (recordemos que a este ritmo el motor en 6ª no llega a 2.600 rpm) empieza a costarle subir de vueltas, pero con una 5ª larga podemos echar mano de ella en ocasiones puntuales, y ya sobre los ilegales 160 km/h (rozando las 3.000 rpm) acaba por hacer tope, señal del exagerado desarrollo de la misma.

A cambio, su consumo real todo uso es realmente comedido. La casa anuncia un promedio combinado de 3,8 lts/100 km, con un mínimo interurbano de 3,6 y un máximo urbano de 4,1, como se ve en un abanico muy cerrado (sólo medio litro de mínimo a máximo). Nuestra unidad de prueba nos gastó (siempre en modo Eco) 5,5 en autovía, al crucero normal de 120/130 km/h, con un máximo de 6,2 a cruceros ya abiertamente ilegales y recurriendo a la 5ª en más de una ocasión. En carretera, a 90/100 km se quedó por debajo de 5 (4,9), y en ciudad superó por muy poco (6,1) los 6 litros cada 100 km.

Comportamiento: noble y seguro.- En cuanto a comportamiento dinámico en carretera, este Kadjar tampoco defrauda. Tiene una gran progresividad y nobleza de reacciones, más próxima a la de un turismo compacto que un SUV. En asfalto hay poco que mencionar, se inscribe bien en la trayectoria marcada, balancea poco y se apoya de una sola vez en los cambios rápidos de apoyo. Se tiene bien y se acuesta poco, resulta cómodo de suspensión y da sensación de aplomo en curvas rápidas y medias. Luego, en las lentas, muestra un poco más sus limitaciones, pese a su calzado adecuado (neumáticos de 215 en perfil 60 y llanta 17). Siempre sin malos modos y con una progresividad de reacciones encomiable (incluso sobre mojado) que hace trabajar muy poco al ESP, sobre todo con este motor que va más que sobrado de chasis.

27 Renault Kadjar 1.5 dCi 110 CV Zen interior consola freno mano electrt 500

La dirección parece tener un tacto más directo que en el Captur y no protesta en los giros secos y cortos, con reacciones muy seguras al frenar en plena curva, sobre todo con buen piso. Sobre terreno bacheado, traqueteos aparte, tampoco altera demasiado su trayectoria en pleno apoyo, aunque lógicamente acusa más los rebotes. Aún así nos habría gustado un tacto de dirección más directo y preciso, que no más rápido, ya que con 2,7 vueltas entre topes (como el Captur) resulta más que suficiente.

El cambio manual es igualmente rápido y preciso, aunque para muchos conductores merece la pena también comprobar la opción del cambio EDC, que por 1.500 euros extra ofrece una gran versatilidad y comodidad de uso sin penalizar el consumo como otros cambios automáticos convencionales (pensando siempre en un uso turístico como es al que se presta este motor, ya que se trata de un cambio más funcional que deportivo, sin levas al volante ni programa “sport”).

Quizá, como único punto algo mejorable sólo se pueda citar a los frenos, no porque sean escasos (presentan un buen tacto y resisten bien el calentamiento) sino por cierta falta de mordiente (a coche cargado sobre todo) que alarga algo más de la cuenta las frenadas (no pasa de 60 m en su detención en seco a 120 km/h, pero se queda cerca). Puede ser cuestión del servofreno, pero en estos coches un tanto altos y no muy ligeros los frenos deben estar siempre por encima de toda sospecha.

37 Renault Kadjar 1.5 dCi 110 CV Zen interior maletero 500

Finalmente, sobre tierra el Kadjar cumple muy razonablemente, sobre todo para su monta de neumáticos corrientes de verano. Se defiende bien sobre pistas de tierra, gracias a su generosa altura, y ya menos en campo abierto, tanto por los neumáticos (cuya presión conviene disminuir un poco en este uso) como por sus ángulos de ataque y salida (18º y 25º respectivamente), algo justos en uso “off road”. Quienes vayan a conducir por tierra de modo más frecuente que esporádico deben considerar seriamente la opción del acabado Xmod, que además del autoblocante electrónico Extended Grip (con sus tres niveles de actuación) monta también neumáticos mixtos M+S, con los que ya sí puede con cierta solvencia aventurarse campo a través…

Precio competitivo.- Por último conviene destacar que su relación precio/equipamiento es tan competitiva o más que la de su hermano menor el Captur. La unidad de prueba venía cargada de extras (alerta de cambio de carril, lector de límites de velocidad, cambio automático de luces largas a cortas, cámara de visión trasera… ), pero conviene tener presente que todos los Kadjar traen de serie desde su nivel básico Life seis airbags, ayuda al arranque en cuesta, regulador y limitador de velocidad, luz de cruce diurna, enganches Isofix para asientos infantiles, barras de techo,“kit” antipinchazo, cierre centralizado con mando a distancia, plegado asimétrico (1/3-2/3) de asientos traseros, 4 elevalunas eléctricos, retrovisores externos por mando eléctrico y calefactables, llantas de 16” (acero) y programa de conducción Eco mode.

El nivel Intens añade el climatizador, acceso “manos libres”, distinta tapicería (gris oscuro), manillas de puerta y carcasas de retrovisores en color carrocería y las llantas de aleación (16”), rematando el paquete con un equipo de audio con radio CD + Bluetooth, USB y Aux. (4 altavoces), etc…

Y el nivel ensayado Zen añade los faros antiniebla (con función direccional), los sensores de lluvia y luz para el activado automático de faros y limpiaparabrisas, volante y pomo del cambio en piel y las llantas de aleación de 17” (con neumáticos de 215/60 R17 en vez de 205/55 R16). Y como guinda de remate, el navegador Media Nav Tom Tom. En suma, un SUV agradable de conducir (y más con el cambio EDC opcional), que nos sirve de turismo, familiar y todo camino, económico de consumo y fácil y seguro de conducir, capaz de servir para todo y para todos.

Versiones del modelo: 'Kadjar'

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